martes. 19.03.2024

El Kale, al que muchos consideran un superalimento, está de moda. En Estados Unidos incluso se le ha dedicado un “Día Nacional” ¿La razón del éxito de esta nueva verdura? Pues al paracer, sus grandes virtudes nutricionales: más hierro que la carne de ternera, más calcio que la leche, apenas calorías… ¿Es para tanto?.

 

No es una novedad

El kale es lo que en España llamamos de toda la vida berza, un tipo de col rizada, ingrediente fundamental en la cocina gallega. Pero claro, kale suena mucho más “exótico”, y parece que se vende mejor.

 

El kale o berza es una crucífera, al igual que el repollo, la lombarda, las coles de Bruselas, la coliflor, el brócoli, los grelos o incluso el nabo y el rábano.

 

Este tipo de verduras se caracterizan por:

- Tener un alto contenido en agua, lo que les hace tener muy pocas calorías

- Presentar un alto contenido en fibra (efecto saciante), por lo que son muy útiles en dietas de reducción de peso.

- Son ricas en vitaminas del grupo B, C, E, y K.

- Son ricas en minerales como el potasio, calcio y magnesio. ¿Superalimentos?

 

No se paran ahí los beneficios del kale (y de las demás coles).

Los glucosinolatos, compuestos azufrados propios de estos vegetales (y culpables de su mal olor durante la cocción), se están investigando por su efecto preventivo del cáncer de próstata.

Los sulfofaranos (otros compuestos azufrados) de la berza parecen tener efectos antiinflamatorios.

 

Contienen boro, un mineral que previene la perdida de estrógenos y ayuda a fijar el calcio de los huesos, por lo que resultan recomendables para la dieta de la mujer en la menopausia.

 

Hierro y calcio… sí, pero menos

El kale tiene hierro, sí, pero ¿más que un filete? La diferencia entre ambos es que el hierro de origen animal (carne, casquería) es hierro hemo y se absorbe mucho mejor (se absorbe alrededor del 25%), mientras que el de origen vegetal (lentejas, espinacas... o kale) es hierro no hemo, y a pesar de contar con una buen cantidad, su absorción es mucho más baja (no más del 5%).

 

Algo similar sucede con el calcio: mientras que el de la leche es muy "biodisponible", fácilmente aprovechable por el organismo, el calcio presente en los vegetales se absorbe menos, por la presencia de fitatos.

 

En cualquier caso, los alimentos de origen vegetal deberían ser el pilar de nuestra dieta, auténticas joyas nutricionales, generalmente pobres en calorías y muy ricas en nutrientes. No obstante, a veces su riqueza en determinados minerales o vitaminas pudiera llegar a tener algún efecto en ciertos usuarios.

 

En el caso del kale en particular: las personas con hipotirodismo podrían tener problemas, ya que los compuestos azufrados interfieren en la absorción del yodo, los enfermos que toman anticoagulantes también deben tener cuidado, por el elevado contenido en vitamina K. Una buena opción ¡y de temporada!

 

Dejando a un lado las modas y el marketing, llámese kale o berza, es una gran noticia que se recuperen estas verduras tradicionales, que hasta ahora no han sido especialmente populares pero tienen mucho a su favor: sus propiedades nutricionales y su precio económico las hacen ideales para incluirlas en nuestra dieta, además ahora están en su mejor momento.

 

Fuente original artículo: ocu

Kale: la verdura de moda es una berza gallega