Lucas Pérez, extremo del Deportivo, ha reconocido que este domingo ha sacado la rabia contenida cuando celebró el gol que le endosó al Valencia (3-0) en su primer encuentro en la máxima categoría del fútbol español.
"Había mucha rabia porque he luchado mucho estos años por lograr mi sueño. Estoy muy feliz de estar en mi casa y marcar. Mis compañeros han estado de diez", declaró a los periodistas tras el partido.
Lucas, que nació en La Coruña, pero no vistió la camiseta del Deportivo hasta que fue incorporado esta temporada procedente del PAOK de Salónica griego, se acordó en el gol de familiares y amigos.
"El gol se lo dedico a mis abuelos, que sin ellos no estaría aquí, y los amigos que me han apoyado en momentos duros de mi vida", indicó el futbolista, que siendo un adolescente se fue a Madrid para formarse en el Atlético, luego pasó por el Rayo Vallecano y posteriormente se marchó a Ucrania y Grecia.
"Se te viene a la mente que pasé por Ucrania, que estuve lejos de mi familia y ahora estoy muy contento de estar aquí", dijo.
Lucas explicó que el Deportivo necesitaba la victoria después de cuatro derrotas consecutivas y días "muy duros" en el vestuario.
"Estas dos semanas se hablaba de actitud, de que no había confianza en nosotros y lo hemos cambiado ante el Valencia", sentenció.
