viernes. 29.03.2024

Un doblete de Adrián López alimentó este viernes las esperanzas del Deportivo de lograr la permanencia en LaLiga Santander y hundió al Málaga (3-2), para el que salvarse se ha convertido casi en una utopía. Era un partido de alta tensión, el último tren para que el Deportivo y el Málaga alimentaran sus esperanzas de salvación, y lo peor que les podía pasar a ambos es que empataran, algo que estuvo a punto de producirse.

 

Lucas Pérez adelantó a los locales con un penalti a los seis minutos de partido, el Málaga se repuso antes del descanso y volvió a hacerlo cuando Adrián desequilibró el encuentro en la segunda parte pero tras el tercer gol de los deportivitas, otra vez obra del asturiano en los instantes finales, los de José González no pudieron levantarse. Los malaguistas intentaron dar primero con una pared de sus dos delanteros, En-Nesyri y el uruguayo Diego Rolan, pero Rubén atajó el disparo del sudamericano, que el pasado verano se comprometió por el Deportivo para la próxima temporada a pesar de su cesión posterior al equipo malagueño. Los locales plantearon el encuentro al contragolpe y el Málaga se lo permitió.

 

Les salió a la primera, cuando tan solo habían transcurrido cinco minutos. Çolak buscó la espalda de la zaga con un pase hacia Lucas Pérez, Luis Hernández falló en el despeje y después cometió, a ojos de Mateu Lahoz, penalti sobre el delantero coruñés, que desde los once metros puso fin a una sequía de 1.547 minutos y casi una vuelta del campeonato (su anterior tanto había sido, precisamente, ante el Málaga).

 

En su celebración, Lucas pidió perdón a los aficionados, algunos de los cuales se citaron delante de Tribuna 45 minutos antes del partido para protestar por la mala temporada del equipo, tildar de mercenarios a los jugadores y pedir la dimisión de la directiva. Cuando el balón echó a rodar, las protestas se convirtieron en aplausos hasta que empezaron los silbidos cuando el Málaga dio un paso al frente y el Deportivo desapareció en ataque. Riazor intuía el gol de los andaluces y el técnico local, Clarence Seedorf, se giró a la grada para pedir su apoyo.

 

Lo hizo justo antes de que el Málaga, a los 41 minutos, sacara un córner que cabeceó Ignasi Miquel y metió en propia puerta el brasileño Guilherme en su intento por evitar que Rolan marcara. Ante los abucheos de Riazor, Seedorf volvió a girarse hacia la grada, pero no evitó que la música de viento acompañara a sus jugadores en el camino al vestuario tras cuatro saques de esquina a favor que apenas supusieron peligro para los andaluces.

 

De vuelta al césped, Roberto evitó que Lucas Pérez anotara su segundo gol al despejar un remate de primeras del delantero deportivistas en una falta lejana, casi en la medular, que había peinado Albentosa. El Deportivo produjo más que los andaluces en el arranque del segundo periodo, pero reaparecieron sus problemas para ver portería, algo que se ha hecho habitual desde la llegada de Seedorf al banquillo blanquiazul (solo había celebrado dos goles, uno de ellos del portero del Eibar en propia meta, en los ocho partidos anteriores).

 

Adrián López perdonó en un mano a mano con el portero del Málaga a pase de Lucas Pérez y Guilherme disparó al poste (min.66) tras haberle robado el balón a Lacen, que se lesionó en esa acción y tuvo que pedir el cambio. El Deportivo insistió y encontró el gol a falta de veinte minutos en un centro de Pedro Mosquera que conectó Adrián para desquitarse de su anterior fallo.

 

El equipo coruñés, sin embargo, apenas conservó la ventaja. Tres minutos después, Navarro derribó a su compañero Mosquera en el lateral izquierdo cuando el centrocampista coruñés tenía la posición ganada y Samu García, atento, se llevó el balón y asistió a Rolan, que remató de primeras y restableció la igualada. El Málaga, que acabó con tras delanteros para buscar el triunfo, lo acarició con un cabezazo de En-Nesyri que rechazó el larguero de la portería del Deportivo. Los de Seedorf también tuvieron el partido en una ocasión de Lucas Pérez a los 85 minutos, pero Roberto volvió a cruzarse en su camino, no así en el de Adrián López, que repitió como goleador, esta vez a pase de Borja Valle, cuando faltaban cuatro minutos para el final, un gol que da esperanza al Deportivo y deja al Málaga casi sentenciado.

3-2. Adrián López alimenta la esperanza del Dépor y hunde al Málaga