viernes. 19.04.2024

El entrenador del Rio Natura Monbus Obradoiro, Moncho Fernández, ha asegurado en declaraciones a EFE que observa "mucha ilusión" en todos los jugadores en el inicio de la pretemporada y defiende que ésta "tiene que ser la gasolina que mueva al equipo". El conjunto compostelano empezó a trabajar el martes con un vestuario "cargado de ilusión, de esperanzas y de ganas de hacer las cosas bien" en el que nueve jugadores de los doce son nuevos con respecto al último curso.

 

"Tenemos una plantilla que creo que es la mejor que hemos podido construir con las características del club. Ahora lo que hace falta es que esta plantilla sea un equipo, hace falta trabajo, hace falta el tiempo, eso no se puede improvisar de un día para otro", señala el técnico. En general nota "mucha ilusión y muchas ganas en todos los que han venido" y eso le hace pensar que será un gran curso en el que la meta del equipo es, una vez más, mantener la categoría. "Esa ilusión se hace contagiosa para nosotros, para el Consejo (de Administración) y para el público.

 

Tiene que ser la gasolina que mueva al Obradoiro de esta temporada", argumenta tras pocas horas junto a sus nuevos hombres. Lo fundamental es el club, aunque "si por el camino destacan los chicos será buena señal, porque significa que lo hacen bien y eso ayudará a ganar partidos".

 

"La esperanza es que los jugadores cumpliendo sus objetivos nos ayuden a conseguir los nuestros, no hay otro secreto. No buscamos ser cazatalentos, lo que buscamos es que el Obradoiro pueda conseguir sus objetivos, para eso necesitamos que los jugadores crezcan a nuestro lado", apunta.

 

A pesar de que no piensa en ser un descubridor de talentos, reconoce que lo ha hecho en las últimas campañas, en especial el último curso cuando el pívot Mike Muscala estuvo apenas unos meses en el club antes de debutar en la NBA.

 

"En los últimos años hemos visto que ha servido para que muchos hayan dado un paso adelante en la consecución de otras metas más grandes para el gran público, como digo yo siempre, pero no más dignas que las nuestras", agrega. Ahora es el preparador físico, Óscar Viana, el que lleva la batuta, pues necesita que los jugadores estén a punto después de varios días "de trabajo progresivo" para empezar al cien por cien cuando llegue el inicio de la Liga Endesa en octubre en el Fontes do Sar.

 

"Hay que hacer un trabajo de adaptación a las cargas. Aunque los jugadores cada vez son más profesionales y se cuidan más en verano, no tiene nada que ver el trabajo que puedan hacer en su casa con el que se hace en la pista. Se les hará más duro, pero no serán los entrenamientos más duros de la temporada", concluye.

 

Moncho Fernández: "La ilusión tiene que ser la gasolina que mueva al Obradoiro"