jueves. 28.03.2024

Una investigación de la Universidad de Santiago de Compostela (USC) analiza cómo frenar el ciberacoso desde las familias, además de evidenciar que solo un 6 por ciento de los progenitores saben que sus hijos fueron víctimas de este fenómeno.

 

Las familias desconocen qué hacen los menores cuando acceden a la red, por más que estén conectados en casa, tal y como concluye la investigadora Leticia López-Castro, del Grupo de Investigación ESCULCA de la USC, en su Tesis doctoral “El ciberacoso en el alumnado de Educación Primaria. Ejes de la prevención en el entorno familiar”, dirigida por la profesora Diana Priegue.

 

En el estudio se analiza la prevalencia del ciberacoso en Educación Primaria, contando con la participación de 1.169 familias cuyos hijos e hijas estudian los dos últimos cursos (5º y 6º) de Educación Primaria en un total de 26 centros educativos de Galicia.

 

“Si bien mayoritariamente las investigaciones previas se centraron en la incidencia del fenómeno en educación secundaria, esta tesis permite obtener datos que reflejan la existencia de situaciones de ciberacoso desde edades muy tempranas”, señala la autora, que obtuvo una cualificación de sobresaliente Cum Laude con mención internacional.

 

Los datos obtenidos revelan que en el hogar familiar el 72 por ciento de los niños y niñas emplean de manera cotidiana la tableta para conectarse a Internet, y un porcentaje superior al 50 por ciento accede a la red con el ordenador portátil o usando el teléfono móvil.

 

Acceden a la red dos o tres veces por semana, y el 41 por ciento informa que se conectan diariamente entre una o dos horas. Pero además de confirmar la necesidad de mejorar la competencia digital de los progenitores, “los resultados permiten identificar las variables familiares que, bien como factores de riesgo o bien como factores protectores, intervienen en las situaciones de ciberacoso”, subraya la autora de la tesis.

 

“Es determinante incidir en las dimensiones que configuran la mediación parental de la tecnología, es decir, el grado de regulación-control y de comunicación-apoyo”, comenta la profesora Diana Priegue, directora del trabajo.

 

Se concluye el estudio insistiendo en la importancia de otorgarle un mayor protagonismo a las familias en la prevención del ciberacoso, desde una perspectiva interdisciplinar e implicando a los centros educativos y sus profesionales. El tribunal de la tesis estivo presidido por Miguel Ángel Santos Rego, catedrático de la USC; la profesora Armanda Pinto da Mota Matos, de la Universidad de Coimbra, que actuó como vocal; y Antonio Valle Arias, catedrático de la Universidad de A Coruña (UDC).

Un estudio de la USC analiza cómo frenar el ciberacoso desde las familias