La junta de gobierno de la Diputación de Lugo autorizó hoy la inversión de 2,2 millones de euros con cargo al Plan de Impulso al Rural y al Sector Primario, una cantidad que fue invertida en realizar un total de 310 actuaciones para favorecer la actividad agroganadera y mejorar las condiciones de vida en pequeñas localidades de los 67 municipios lucenses.
En rueda de prensa, el diputado provincial Pablo Rivera informó de que esas 310 subvenciones fueron concedidas a las entidades beneficiarias mediante un proceso de concurrencia competitiva, de modo que fue una convocatoria abierta a "colectivos vecinales de toda la provincia".
Las inversiones realizadas se centraron en la mejora de accesos en la zona rural, en traídas de agua y en la rehabilitación de edificios comunitarios para convertirlos en centros socioculturales. También en la recuperación de tierras abandonadas y en ayudas a los sectores vitivinícola y hortícola.
