jueves. 28.03.2024

La sección segunda de la Audiencia Provincial de Lugo ha condenado a un hombre y a una mujer, pareja en el momento de los hechos juzgados, por un delito de blanqueo de capitales y les impone penas que, en conjunto, suman cuatro años y medio de cárcel y una multa de cuatro millones de euros. En concreto, según informó el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), fija para el hombre una pena de dos años y medio de cárcel y una multa de tres millones de euros, mientras que para ella establece una condena de dos años de prisión y una sanción de un millón de euros.

 

La Audiencia Provincial de Lugo considera probado que el acusado "participó en la venta de minutos de telefonía a terceros por medio empresas que canalizaban las llamadas" a través del denominado sistema SIMBOX, además de participar en "otras actividades ilícitas, como "fraude fiscal" o contrabando de teléfonos móviles liberados. La sala llegó a la conclusión de que los acusados canalizaban los ingresos obtenidos mediante ese tipo de actividades ilícitas a través de un conjunto de sociedades que utilizaban para blanquear el dinero. El juicio se celebró en la Audiencia Provincial de Lugo el pasado 9 de mayo. Un acusado se encaró en la vista oral, que se celebró el pasado 9 de mayo en la Audiencia Provincial de Lugo con la magistrada y el representante del ministerio público, al afirmar durante su declaración que llevaba "diez años embargado" por divagaciones de los responsables de la investigación.

 

El acusado, Juan Carlos F., dijo que llevaba "diez años esperando por este juicio", en el que estaba encausado por "una cosa en la que divagan". Las palabras del acusado fueron cortadas inmediatamente por la presidenta del tribunal, que amenazó con expulsarlo de la sala si no cambiaba de actitud y se limitaba a responder de la mejor forma posible a las preguntas del ministerio fiscal. Juan Carlos F. y su ex mujer Begoña L. se sentaron en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial para responder por un supuesto delito de blanqueo de capitales, por el cual el ministerio público solicitaba para él una pena de tres años de prisión y una multa de 3 millones de euros, así como que le fuesen decomisados todos los bienes que figuran a su nombre.

 

Para su ex mujer, el ministerio público pedía una pena de dos años y tres meses de prisión, así como una multa de 1,5 millones de euros, y el decomiso de todas las propiedades a su nombre, que ya le fueron intervenidas, al igual que a su marido, en el transcurso del citado procedimiento. La Fiscalía sostenía, en base a la investigación desarrollada por la Agencia Tributaria, que ambos acusados crearon o compraron participaciones en numerosas sociedades, entre los años 2003 y 2009, para canalizar ingresos, en algunos casos muy elevados -superiores incluso a medio millón de euros-, a pesar de que esas empresas no tenían actividad comercial aparente.

 

Sin embargo, en la vista oral, Juan Carlos F. aseguró que su participación en todas las sociedades que aparecían en el proceso judicial estaba justificada, porque lo que pretendía era "hacer negocio con ellas", solo o en compañía de otros socios. De hecho, aseguró que todas esas empresas tenían detrás "un proceso y una actividad" e incluso llegó a decir que podría describir con todo detalle "qué función" realizaban, el "número de empleados" o los "ingresos" que tenían. Afirmó, además, que "en algunas tenía más participación" y en otras menos, lo cual también se reflejaba en las correspondientes nóminas. La defensa negó "el relato de los hechos" realizado por el ministerio fiscal y solicitó "la libre absolución de ambos acusados"

Penas de prisión y 4 millones de euros de multa para una pareja por blanqueo de capitales