jueves. 18.04.2024

Alrededor de medio centenar de trabajadores de Ence y de sus empresas auxiliares se han concentrado este viernes ante la Diputación de Pontevedra para reivindicar la continuidad de la fábrica en esta ciudad, ante el riesgo de que la justicia anule la prórroga concedida por el Gobierno de Mariano Rajoy para ocupar terrenos de Costas hasta 2073. Ante las escalinatas de entrada al Pazo Provincial, los trabajadores corearon consignas como "Ence sí, paro no", "Dejadnos trabajar" o "Ence no se cierra", e intentaron participar en el pleno de la corporación que, finalmente, se celebró a puerta cerrada.

 

"Somos padres de familia que venimos a defender el pan de nuestros hijos", ha asegurado la presidenta del comité de empresa de las oficinas de Ence en Pontevedra, Ana Cedeira, que ha censurado que la presidenta de la Diputación, la socialista Carmela Silva, no les haya permitido hablar en el pleno alegando que su solicitud de intervención había llegado fuera de plazo. Tras varias advertencias para que mantuviesen el orden, Silva suspendió la sesión plenaria y acordó celebrarlo en la sala de juntas, aunque el PP decidió no asistir en solidaridad con los trabajadores.

 

Con esta movilización, según Cedeira, los empleados de Ence y sus empresas auxiliares querían visibilizar que "somos personas que queremos mantener nuestros puestos de trabajo" y que los políticos que "toman decisiones" sobre su futuro "nos vean las caras". "Este es el primer paso pero habrá más", ha señalado la representante de los trabajadores, que ha adelantado que esta lucha no será solo en la calle sino también en los tribunales. El presidente del comité de empresa de la factoría, Ignacio Acuña, ha asegurado por su parte que el "mensaje" de la compañía en su junta de accionistas, afirmando que si cierra su fábrica de Pontevedra no invertirá en Galicia y lo hará fuera de España, ha caído como un "ladrillazo" entre los trabajadores.

 

Alrededor de medio centenar de trabajadores de Ence y de sus empresas auxiliares se han concentrado este viernes ante la Diputación de Pontevedra para reivindicar la continuidad de la fábrica en esta ciudad, ante el riesgo de que la justicia anule la prórroga concedida por el Gobierno de Mariano Rajoy para ocupar terrenos de Costas hasta 2073. Ante las escalinatas de entrada al Pazo Provincial, los trabajadores corearon consignas como "Ence sí, paro no", "Dejadnos trabajar" o "Ence no se cierra", e intentaron participar en el pleno de la corporación que, finalmente, se celebró a puerta cerrada.

 

"Somos padres de familia que venimos a defender el pan de nuestros hijos", ha asegurado la presidenta del comité de empresa de las oficinas de Ence en Pontevedra, Ana Cedeira, que ha censurado que la presidenta de la Diputación, la socialista Carmela Silva, no les haya permitido hablar en el pleno alegando que su solicitud de intervención había llegado fuera de plazo. Tras varias advertencias para que mantuviesen el orden, Silva suspendió la sesión plenaria y acordó celebrarlo en la sala de juntas, aunque el PP decidió no asistir en solidaridad con los trabajadores.

 

Con esta movilización, según Cedeira, los empleados de Ence y sus empresas auxiliares querían visibilizar que "somos personas que queremos mantener nuestros puestos de trabajo" y que los políticos que "toman decisiones" sobre su futuro "nos vean las caras". "Este es el primer paso pero habrá más", ha señalado la representante de los trabajadores, que ha adelantado que esta lucha no será solo en la calle sino también en los tribunales. El presidente del comité de empresa de la factoría, Ignacio Acuña, ha asegurado por su parte que el "mensaje" de la compañía en su junta de accionistas, afirmando que si cierra su fábrica de Pontevedra no invertirá en Galicia y lo hará fuera de España, ha caído como un "ladrillazo" entre los trabajadores. 

Trabajadores de Ence y auxiliares protestan ante la Diputación de Pontevedra