viernes. 29.03.2024

El letrado de Sinaí Giménez, José Luis Gutiérrez Aranguren, ha expresado hoy su "preocupación", y la del clan gitano de los morones, por la "excesiva duración" de la prisión preventiva para su representado y otros cuatro miembros de la familia: el patriarca Olegario Giménez, actualmente en arresto domiciliario, y sus hijos Juan Paulo, Marino y Saúl, que, junto con Sinaí, permanecen en la cárcel desde el pasado 14 de abril.

 

Gutiérrez Aranguren ha comparecido ante los medios de comunicación en los juzgados de la localidad pontevedresa de Cangas y ha censurado que estas personas se enfrenten "a molinos de viento", con respuestas negativas basadas en "argumentos de tipo teórico y que no entran en el fondo del asunto" a las peticiones de libertad presentadas por las defensas.

 

Los citados miembros del clan de los morones permanecen en prisión provisional por una causa que investiga la presunta comisión de los delitos de organización criminal, extorsión, blanqueo de capitales y tráfico de drogas, entre otros. El abogado ha defendido que esta medida "no puede convertirse en una especie de pena anticipada", ya que es de tipo "excepcional" y debe tener "una duración limitada".

 

Los argumentos esgrimidos por la justicia para denegar la libertad a estas personas, ha añadido, son, por una parte, "que se trata de una banda criminal organizada" y, por otra, que se dan "presupuestos legales para mantener esas medidas". Sin embargo, Gutiérrez Aranguren ha asegurado que los cinco hombres continúan privados de libertad acusados de "delitos que ni cometieron o en muchos casos no son constitutivos de infracción penal".

 

Las "quejas" de las defensas, ha abundado, radican en "la excesiva duración de la investigación por la lentitud con la que se están tomando declaraciones" a los testigos protegidos, "con una cadencia de dos por semana o dos por mes", ha dicho.

 

Otra de las "quejas" se basa en el traslado de Sinaí Giménez a la prisión de Villabona, en Asturias, y a la "dispersión" del resto de miembros por centros penitenciarios de la comunidad gallega, lo que "dificulta el arraigo y los desplazamientos de la familia para las visitas"; además del hecho de que ninguno de ellos tenga antecedentes penales.

 

Así, el letrado ha asegurado que Sinaí, su padre Olegario y sus hermanos Saúl, Juan Paulo y Marino se dedicaban "a organizar el caos que había" en los mercadillos y, para ello, se "agruparon en cooperativas", con el objetivo de "minorar los gastos y facilitar las labores burocráticas", a pesar de lo cual "siguen estando acusados de delitos que ni cometieron o en muchos casos no son constitutivos de infracción penal".

 

Finalmente, ha tildado las declaraciones de los testigos protegidos como "una tomadura de pelo" y ha concretado que, algunos de ellos, denuncian hechos cometidos "hace 30 años". "Son generalidades", ha expresado.

La defensa de Sinaí denuncia "excesiva duración" de la prisión preventiva