sábado. 20.04.2024

El colectivo de vendedores ambulantes de Vigo se ha mostrado satisfecho con el trabajo desarrollado desde el consistorio local para garantizar la seguridad en los mercadillos de Bouzas y Coia, después de que ambas ferias fuesen suspendidas durante meses, hace ahora más de un año, al resultar herido un vendedor en un tiroteo. En concreto, en Vigo se paralizó la celebración de los dos habituales mercadillos tras un incidente en Coia en el que fue tiroteado un grupo de ambulantes del clan gitano de los zamoranos y uno de sus miembros resultó herido.

 

La portavoz del colectivo, Begoña Martínez, ha asegurado ante los periodistas, después de mantener una reunión con el alcalde, Abel Caballero, y otros responsables municipales, que la regulación de la actividad ha resultado un "éxito". Ha abundado en que las decisiones tomadas al respecto han provocado que, "por primera vez, el comercio ambulante esté totalmente organizado". Ha destacado que la nueva normativa ha propiciado "una limpieza de mafias y personas que extorsionaban" y ha valorado que, a día de hoy, en las dos ferias se trabaje "con los mismos derechos y libertades" cuando antes "había muy mal ambiente, y se notaba en las ventas".

 

Además, y en relación a las tasas por la ocupación de la vía pública, Martínez ha expresado que "están al pie de otros ayuntamientos de Galicia", aunque la urbe olívica es pionera en algunos aspectos. Ha citado, por ejemplo, la exención del pago a aquellos vendedores que, por cuestiones personales o de otra índole, no pueden acudir a su puesto a pesar de haber solicitado el espacio. Abel Caballero ha celebrado, en una rueda de prensa, que la situación de "opacidad" en los mercadillos de Bouzas y Coia, con 117 y 88 puestos, respectivamente, se haya tornado en "transparencia" tras la intervención del Ayuntamiento.

Los ambulantes de Vigo, satisfechos con la marcha de los mercadillos