martes. 19.03.2024

La auxiliar de enfermería gallega Teresa Romero se está recuperando "muy bien" del ébola y, "salvo sorpresas", es bastante probable que no tenga secuelas una vez superada la enfermedad, por lo que podría llevar una vida normal cuando sea dada de alta. Aunque los médicos "no se mojan mucho", esto, al menos, es lo que han dado a entender a la familia de Romero, ha asegurado a Efe Teresa Mesa, portavoz de la auxiliar y de su marido, Javier Limón.

 

Mesa, quien ayer habló por teléfono con la paciente, ha señalado que tiene "mucha fuerza, muchas ganas de salir al exterior y saber lo que ha pasado, la repercusión, y, sobre todo, de respirar aire puro". Una de las noticias a las que deberá enfrentarse Teresa Romero será a la de la muerte de su perro Excalibur, un animal al que ella estaba muy unida y que fue sacrificado, por lo que, según la portavoz, va a afrontar "mal" esta circunstancia, con un "tremendo disgusto". Mesa quiere ser ella personalmente, junto con la psicóloga del hospital, la que informe a Romero de la muerte del perro, lo que hará una vez abandone la planta de aislamiento y pueda recibir visitas.

 

La portavoz ha recordado que entre hoy y mañana se conocerán los resultados de la segunda prueba que se le practicará para confirmar que ha superado el ébola, después de que el primer análisis diera negativo. Si esta nueva prueba da también negativa, Teresa podría abandonar la planta sexta, en la que se encuentra aislada, y ser trasladada a otra "en cuatro o cinco días", ha señalado Mesa.

Teresa Romero no tendrá secuelas, "salvo sorpresas", según dice su portavoz