viernes. 29.03.2024

Un nuevo estudio publicado recientemente y elaborado por grupos de investigación italianos y estadounidenses, coordinados por Antonio Salas Ellacuriaga y Federico Martinón, señala al altiplano de Perú como el "verdadero centro neurológico del sur de América durante miles de años".

 

Este lugar, junto con el eje sur de la cordillera de los Andes, son las zonas de mayor dinamismo y éxito poblacional en la colonización del país tras los primeros asentamientos humanos en época precolombina, registrados hace más de 12.000 años, indica la Universidad de Santiago en un comunicado.

 

Esta es una de las principales conclusiones de un estudio genómico publicado en la revista "Genome research", de referencia en este campo, que ha trabajado con el genoma de miles de individuos que representan poblaciones nativas americanas del pasado y con el ADN de distintos restos arqueológicos durante los últimos 8 años. Salas es profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Santiago de Compostela (USC) y Martinón es el jefe de Servicio de Pediatría del CHUS. Ambos son investigadores principales del Instituto de Investigaciones Sanitarias de Santiago (IDIS).

 

Este ejercicio de "antropología molecular", tal y como lo define el profesor Salas, tiene posibles aplicaciones en el campo de la ?genética lúdica?, ya que ha permitido recabar miles de perfiles genéticos distintos; y también en el campo de la sanidad, en el estudio de virus endógenos o de especial prevalencia en América del Sur, como el zika.

 

En el estudio se diferencian las rutas de colonización andina y atlántica, cuya interacción entre ambas fue ?marginal? al servir el Amazonas como una marcada barrera natural. Además, Salas destaca la capacidad de adaptación de las poblaciones andinas a la vida en altitud, que "contrasta fuertemente con la necesaria adaptación para vivir en el complejo ecosistema de la selva amazónica" más presente en otros biomas del subcontinente.

 

En cualquier caso, el estudio incide en el rol desempeñado por el altiplano de Perú, un "enclave fundamental" para las poblaciones primigenias de Sudamérica, que apenas recibió influjos de los moradores del este y cuyo éxito demográfico permitió iniciar un proceso de expansión hace aproximadamente 8.000 años que redundó en una "cantidad muy grande de variación genética".

 

Asimismo, en cuanto a los movimientos poblacionales, las conclusiones indican que en la zona andina y pacífica se producían siempre de norte a sur, mientras que en el Atlántico, aunque al principio fuese igual, también se dieron movimientos expansivos hacia la zona caribeña del norte.

Un nuevo estudio sitúa al altiplano peruano como centro neurológico de Sudamérica