Un incidente en una torreta eléctrica es la hipótesis central que se maneja como desencadenante del voraz incendio forestal que afecta a los municipios coruñeses de Dodro y Rianxo y que ha arrasado 850 hectáreas, han explicado a Efe fuentes de la investigación. La Guardia Civil es la que indaga las causas de este fuego con varios focos, avivados por el viento del nordeste, que todavía avanza sin control. La subdelegada del Gobierno en A Coruña, Pilar López-Riobóo, que se ha desplazado a la zona afectada, ha indicado a la prensa que la preocupación "nos embarga a todos" y ha confiado en poder atajar las llamas "cuanto antes".
Acompañada por el coronel Francisco Javier Jambrina, jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de A Coruña, ha indicado que un nuevo contingente reemplazará al colectivo desplazado por la Unidad Militar de Emergencias (UME), que permanecerá en el lugar el tiempo que sea necesario. Son un centenar los que están trabajando, al igual que su relevo, mientras que del Instituto Armado hay 35 efectivos, que operan junto a los diferentes servicios de emergencias y los bomberos procedentes de las localidades cercanas y de poblaciones del norte de Pontevedra incluso, ha detallado la subdelegada.
López Riobóo ha afirmado asimismo que, según la información de la que se le ha dado traslado, será difícil controlar el incendio "antes de que acabe el día", porque el viento está "un poco descontrolado" y "la cola" del mismo fluye, "va de un lado hacia otro y puede reavivar algún foco". Pero "si no se controla esta noche, ojalá que mañana", ha concluido. La UME está protegiendo los núcleos en la zona Brión-Rianxiño, Brión-Abuín e Isorna.
