La Diputación de A Coruña ha acabado la redacción de los distintos tramos de la primera Vía Verde de la provincia, que conectará con 36,5 kilómetros Santiago y Cerceda, sobre las viejas vías de ferrocarril, informa esta Administración. La institución provincial ya cuenta con la cesión de los terrenos por parte de Adif y con las autorizaciones necesarias para poder licitar las obras, que supondrán una inversión de cerca de 2,4 millones de euros, de los que 1,8 serán financiados con los fondos europeos Feder y el resto con fondos de la Diputación.
Así lo ha confirmado el presidente de la Administración provincial, Valentín González Formoso, durante la visita oficial que ha realizado al municipio de Cerceda este jueves, acompañado del nuevo alcalde de la localidad, Juan Manuel Rodríguez. En el encuentro, González Formoso ha manifestado que la Vía Verde, que es “una idea ambiciosa, que comenzó a gestarse hace más de una década, y que será una realidad durante el presente mandato gracias al trabajo conjunto de la Diputación y de los cinco ayuntamientos implicados en el proyecto: Cerceda, Tordoia, Ordes, Oroso e Santiago de Compostela”.
Tras la aprobación definitiva de los proyectos en los plenos municipales, ha sostenido, comenzará el proceso de licitación de las obras. “Además de servir como elemento de vertebración del territorio, recuperando la red ferroviaria abandonada para darle una nueva dimensión más ecológica y sostenible, la Vía Verde tendrá una importante repercusión turística y socioeconómica”, ha enfatizado el presidente.
También ha detallado que se enmarca en la apuesta por la promoción de nuevos modelos de movilidad sostenible con proyectos como la ampliación de la Red Ciclista Metropolitana de A Coruña o las Sendas de los Faros. De los 36,5 quilómetros da Vía Verde, 5,5 kilómetros corresponden al término municipal de Cerceda, 2,48 a Tordoia, 8,3 a Ordes, 7,19 a Oroso y 13 a Santiago de Compostela. Por otra parte, González Formoso ha ofrecido al nuevo regidor de Cerceda, Juan Manuel Rodríguez, que ocupa el lugar que ostentó durante 25 años José García Liñares, inhabilitado por prevaricación, “el apoyo y la colaboración de la Diputación para seguir mejorando la calidad de vida” de los vecinos.
