El viceportavoz del grupo provincial del PP, Carlos Armesto, afirmó que su partido no hizo más que "cumplir" con su "obligación" al denunciar ante el ministerio fiscal la existencia de "supuestas irregularidades importantes" en la ejecución de la obra para transformar el antiguo hotel Miño en la nueva sede de la UNED en Lugo.
Armesto hizo estas declaraciones a EFE después de que la Fiscalía de Lugo tomase la decisión de archivar la investigación al no apreciar indicios de delito en la denuncia que presentó el Partido Popular cuando todavía era presidenta de la Diputación Provincial la actual portavoz del grupo, Elena Candia.
De hecho, aseguró que los populares están "contentos de haber" puesto este asunto en conocimiento de la Fiscalía, porque considera que no es un tema menor que "el presupuesto de la obra se haya incrementado en un 110%", que exista un informe firmado por un funcionario en el que se deja constancia de que "una de las ofertas" para adjudicar la obra "estaba abierta" o que los trabajos lleven "un retraso tan abultado".
Aseguró que su intención "no es judicializar la vida política", pero sí "fiscalizar" la acción de gobierno y, al menos en este caso, vieron necesario acudir a la Fiscalía para ver si esas supuestas irregularidades tenían "algún tipo de relevancia judicial".
En todo caso, a pesar de no haber apreciado indicios de delito, el viceportavoz popular interpreta que la propia Fiscalía reconoce que en ese expediente hay aspectos "francamente mejorables".
