La Consellería del Medio Rural mantiene decretada la "Situación 2" o de riesgo real para la población en el incendio desatado en el ayuntamiento coruñés de Porto do Son, así como en los declarados en las localidades pontevedresas de Arbo y Crecente.
En Porto do Son, el incendio afecta a las parroquias de Baroña, Xuño y Caamaño, aunque la zona afectada en la parroquia de Baroña ya está controlada desde ayer. Antes de que se controlase la situación en Baroña, varias casas y un cámping cercano tuvieron que ser desalojados. Según las nuevas estimaciones, la superficie asolada entre las tres parroquias es de unas 1.000 hectáreas, y en el lugar trabajan 4 técnicos, 29 agentes, 61 brigadas, 32 motobombas, 3 palas, 11 helicópteros y 4 aviones, además de efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
La alerta también se mantiene en el ayuntamiento de Arbo, en la parroquia de Mourentán, donde el fuego, que se inició a las 20.20 horas de ayer, afecta ya a una superficie de 1.515 hectáreas. Allí, vecinos han conseguido grabar en vídeo cómo se prendieron varios focos en el monte de manera simultánea. Para controlar el fuego se han desplazado hasta el lugar 2 técnicos, 10 agentes, 34 brigadas, 22 motobombas, 5 palas, 8 helicópteros y 6 aviones.
En Crecente, en la parroquia de Albeos, las llamas, que se decretaron en la tarde de ayer, afectan ya a 200 hectáreas, lo que ha requerido de la presencia de 1 técnico, 12 agentes, 27 brigadas, 21 motobombas 1 pala y 2 helicópteros. También se mantienen activos, pero sin riesgo para núcleos habitados, el incendio en Laza (Ourense), que ha alcanza las 50 hectáreas rasas, y el del término pontevedrés de Cerdedo, que supera las 20 hectáreas.
Están estabilizados los fuegos declarados en Avión (Ourense), los dos de Soutomaior (Pontevedra), uno de los cuales obligó en la tarde del martes a desalojar a los niños de un centro de Aldeas Infantiles, y el de Santiago. La Consellería de Medio Rural informó de que ya se han controlado los incendios en Cee, en A Coruña, en Cotobade (Pontevedra), donde las fuertes rachas de viento dificultaron las labores de control, en Pontevedra, en Mondariz y en Caldas de Reis, todos en la misma provincia.
