La asociación animalista Libera ha pedido el modelo escocés para prohibir las cacerías con perros al considerar que el Pàrlamaid na h-Alba fue pionero en 2002 al aprobar el llamado acto de protección de animales silvestres en el que se prohíbe el uso de perros en la inmensa mayoría de modalidades de caza.
Entre ellas, señala un comunicado, incluida la tradicional persecución y acoso con perros a zorros, "de forma muy similar a lo que sucede en Galicia cada año en "pseudocampeonatos" autorizados por la Xunta", entiende esta organización. El gobierno escocés consideró que estas prácticas eran crueles y que la llamada "caza deportiva" no tenía ningún sentido en el país, reduciéndose a un negocio de terratenientes y aristócratas, y generando imágenes dantescas de peleas grabadas por los propios cazadores, una Ley que fue repetida en Inglaterra y Gales en 2004.
La Asociación Animalista Libera y la Fundación Franz Weber piensan que la norma escocesa "es un buen punto de partida para reformular de forma completa la actividad cinegética en la comunidad, recordando que hasta siete países europeos prohíben prácticas similares con grupos de perros al considerarlas crueles e ineficaces, mientras algunos estados como Luxemburgo han dictaminado una moratoria a la caza del zorro durante todo un año".
Los defensores de los animales han señalado asimismo que un veto que dispusiera de un periodo de adaptación para ver si todos los escopeteros quieren permanecer con los perros y evitar así abandonos, podría generar un efecto positivo sobre este mismo asunto. Los refugios y protectoras de Galicia reciben en su mayoría canes que han sido empleados o bien desechados de prácticas de caza.
También incidiría positivamente, dicen en la nota, sobre el comercio irregular, ya que hasta ahora son cientos los anuncios publicados en redes sociales, aplicaciones de mensajería instantánea y páginas web de compra-venta fomentando transacciones ilegales de perros para cazar jabalíes, conejos o zorros, sin que la administración haya actuado de forma contundente "contra este fraude diario, que también causa un problema al conjunto de la ciudadanía".
Los colectivos subrayan la legalidad de la propuesta y advierten de que la caza es una de las actividades públicas más desreguladas, donde se permite que un menor de cualquier edad acompañe a personas armadas y presencie los disparos, "además de visualizar riñas crueles con animales silvestres que nada tienen que ver con una supuesta actividad conservacionista". EFE
