sábado. 20.04.2024

El autor Ramón Campos, creador de ficciones televisivas de gran éxito en España, habla en una entrevista con Efe de otra historia, pero esta vez en forma de libro, "El Orfebre" (Planeta), un viaje al fin del mundo para tallar el futuro con las propias manos. La novela, ambientada en la Barcelona de finales del siglo XIX, cuenta las peripecias de un joven orfebre que viaja hasta Kimberley (Sudáfrica) para hacerse con el mayor diamante del mundo con el objeto de liberar a su amada Isabel, que va a ser vendida al pretendiente que le entregue a su padre el mineral más grande.

 

Se trata de una narración, desvela el autor en una entrevista con Efe, que está basada en la realidad, ya que, en aquella época en la ciudad africana se encontró un diamante "al pie de una montaña" y cuando se corrió la voz "miles de mineros de todo el mundo" se trasladaron hasta allí para conseguirlo y el monte desapareció convirtiéndose en un gran agujero con 240 metros de profundidad.

 

"El hecho de que pueda desaparecer una montaña por la ambición de los hombres me pareció que era algo fascinante y que merecía una historia", explica. Tal suceso lo descubrió mientras se documentaba a través de "un manual de diamantista" que encontró en Barcelona, con el que se adentró en el mundo de la orfebrería, ya que le llamó la atención que "en aquella época hubiera una guía para tallar los diamantes con ese nivel de detalle".

 

Campos, que está más acostumbrado a convertir las historias en piezas audiovisuales, admite que decidió que esta fuera una novela por presupuesto, ya que quería una historia épica, con un barco navegando por el Atlántico y un gran hoyo en Sudáfrica y se dio cuenta de que no iba a tener dinero para hacerlo visualmente como se lo imaginaba. Por lo que, para no tener que cortarse a la hora de narrarlo, el guionista decidió embarcarse en su primera novela, que tardó cuatro años y medio en escribir.

 

Pero, al igual que en sus series, en este relato de aventuras no podía faltar el melodrama, ya que al creador le parece "que es uno de los géneros más maravillosos que hay" y por eso afirma que su productora Bambú nació de "la dignificación de la telenovela". Y es que el romance es fundamental en esta narración, en la que el creador pone en contraposición la idea del "amor platónico", encarnado en el personaje de Isabel, y el "amor cotidiano", que se refleja a través de la esclava Etweda que acompaña día a día al protagonista en su viaje.

 

También la paternidad es otro de los ejes del relato, en el que aparecen tres tipos de padre: el del orfebre que le enseña lo que sabe, el que está "dispuesto a vender a su hija por un diamante" y el esclavo que daría su vida "por la libertad de su hija". En esta línea, Ramón Campos confiesa que se inspiró en su padre para crear al del orfebre, ya que "era una persona muy silenciosa", "le encantaba escuchar" y muchas de las enseñanzas que están en la novela como "el orgullo obrero, la lealtad o el respeto" se las enseñó su progenitor. Mientras estaba trabajando en esta historia, se percató de que era casi imposible documentarse desde España sobre la Sudáfrica del siglo XIX, por lo que se fue una semana al país para llevar a cabo toda una investigación histórica.

 

El autor relata que allí hizo "todo lo que iba a vivir el orfebre" y fue a Kimberley, a librerías, a la biblioteca pública, vio el gran hoyo, las minas, los museos que tenían objetos de la época y se trajo "dos maletas llenas de libros" con las que pudo prepararse a fondo para escribir el suyo. Un trabajo que, desvela, no se parece en nada a escribir una serie, ya que "un guión es una herramienta de trabajo" que tiene que valer para que se organicen 150 personas y cuando terminan de rodar "se va a la basura" y, en cambio, en la novela es una sola persona la que asume toda la responsabilidad. Ramón Campos apunta que, aunque de momento necesita centrarse en el mundo audiovisual porque está trabajando "con siete series a la vez", le gustaría, si el libro tiene buena acogida, "volver a viajar con el orfebre en otra aventura".

"El Orfebre", la historia con sello gallego del diamante más grande del mundo