Cada vez más usuarios utilizan diferentes elementos jurídicos para intentar recuperar su dinero y solucionar la situación.
Las hipotecas multidivisas representan a un tipo de préstamo bastante utilizado por la sociedad, el cual permite el pago de la hipoteca a través de otra divisa que no sea el Euro (en francos suizos, dólares o yenes, por ejemplo). Un método de pago diferente, al cual se han acogido una gran cantidad de ciudadanos de la Unión Europea que eran incapaces de pagar la deuda total utilizando el Euro, y que incluso comprobaban como esta no bajaba sino que se incrementaba con el paso del tiempo.
Para afrontar este tipo de situación, la mayoría de los expertos recomiendan ponerse en manos de algún despacho de abogados en La Coruña que sepa qué procedimientos legales hay que seguir para recuperar el dinero lo antes posible.
Porque desde el 30 de abril de 2014, el Tribunal de Justicia de la Unión Europa declaró nula la opción de utilizar multidivisas para pagar la deuda contraída con el préstamo hipotecario, por lo que todas las personas que han utilizado este método pueden pedir su correspondiente indemnización.
¿Qué es una hipoteca multidivisa?
Probablemente, la mayoría de las personas que a día de hoy todavía mantienen algún tipo de préstamo hipotecario con una entidad bancaria han oído hablar del término Hipoteca Multidivisa, debido a que este se puso muy de moda durante la crisis económica que se produjo en el año 2008.
Una fórmula diferente de hacer frente al pago de la hipoteca, que se basa en el uso de otras monedas internacionales para acabar con la deuda total (dólares, yenes, francos suizos, etcétera). Es decir, las hipotecas multidivisas son un mecanismo legal utilizado por muchos ciudadanos de la Unión Europea, que no son capaces de pagar la deuda contraída con el banco mediante el uso del Euro.
Sin embargo, este tipo de fórmula ha acabado siendo perjudicial para la mayoría de los ciudadanos que se acogieron a ella, ya que en lugar de ver como se reducía la deuda contraída, estos comprobaban como se incrementaba con el paso del tiempo sin opción a anular este tipo de proceso.
¿Por qué se han anulado las hipotecas multidivisas?
Muchos ciudadanos de la Unión Europea se han visto en la encrucijada de no poder afrontar el pago de la deuda hipotecaria en otra divisa, debido a que esta no dejaba de aumentar por la volatilidad de las diferentes monedas en el mercado internacional.
Ante esta complicada situación, muchas familias pidieron asistencia legal a través de diversos despachos de abogados, los cuáles consiguieron que finalmente el Tribunal de Justicia de la Unión Europea declarara nulas las hipotecas multidivisas el 30 de abril de 2014. Una decisión que alivió a una gran cantidad de ciudadanos europeos que estaban inmersos en este complejo proceso, y a los cuáles se les dio la razón por la obligación de las entidades bancarias a exponer el funcionamiento del mecanismo de conversión en el contrato.
Los contratos de hipotecas multidivisas firmados no exponían de forma transparente este tipo de mecanismo de conversión, por lo que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea avaló que todos los afectados podían pedir una indemnización a la entidad bancaria correspondiente.
Cómo recuperar el dinero de una hipoteca multidivisa
Aunque el Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha declarado nulo el uso de las hipotecas multidivisas, lo cierto es que a la hora de afrontar un procedimiento judicial de este tipo conviene contar con la ayuda de auténticos profesionales del sector, que sepan qué pasos hay que seguir para conseguir una indemnización.
Algunos despachos de abogados no llevan este tipo de casos, por lo que hay que buscar de forma exhaustiva a través de Internet hasta encontrar a un bufete de abogados que se encargue tanto de las negociaciones previas con la entidad bancaria, como del posterior procedimiento judicial.
En España ya existen varios precedentes de juzgados que han dado la razón a los particulares, debido a que interpretan que las cláusulas establecidas en las hipotecas multidivisas no superan el control de transparencia, y por tanto, suponen un desconocimiento del riesgo real que supone especular en el mercado de divisas.
Si finalmente el juzgado acaba dando la razón al cliente particular, este puede recuperar el antiguo préstamo hipotecario en euros con la correspondiente rebaja del capital pendiente de amortización, y con una devolución de todos los importes pagados de más.
