La firma textil Adolfo Domínguez perdió en su primer trimestre fiscal (marzo a mayo) 8,1 millones de euros, un 478 % más que un año antes, lastrada por la crisis de la covid-19, que obligó a que hasta el 92 % de sus tiendas permanecieran temporalmente cerradas durante el periodo. El cierre de establecimientos conllevó una caída de ventas del 67,3 %, hasta 6,7 millones, y un resultado bruto de explotación (ebitda) negativo de 4,6 millones, frente a los 1,1 millones en positivo de un año antes, según las cuentas remitidas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La facturación retrocedió en todos los mercados en los que opera la compañía, que, no obstante, ha subrayado que en España ha perdido el 35 % de sus ventas acumuladas entre enero y mayo, frente a la caída media del 45 % en el conjunto del sector (según datos de Acotex).
LA VENTA ONLINE SUBE EL 52,3 % Y SE SITÚA COMO SU PRINCIPAL FUENTE DE INGRESOS
Frente a la caída en tiendas físicas, las ventas a través de internet se dispararon el 52,3 % y se posicionaron como la principal fuerte de ingresos de la compañía gallega durante el confinamiento. En un comunicado, Adolfo Domínguez ha apuntado que para hacer frente a esta situación ha adoptado medidas extraordinarias, entre las que se incluyen la reducción en más de un 34 % de sus gastos operativos, la aplicación de expedientes de regulación temporal de empleo o la obtención de financiación extraordinaria.
"A día de hoy tenemos ya el 88 % de nuestra red comercial reactivada (336 de 381 puntos de venta). La reapertura permite recuperar ventas, pero el nivel de consumo está lejos de la normalidad. En agosto, por ejemplo, las ventas se mantuvieron un 25 % por debajo de lo habitual", ha subrayado el director general de Adolfo Domínguez, Antonio Puente. La evolución del consumo marcará el ritmo en este año anómalo, en el que la innovación, la digitalización y el contar con una red comercial optimizada y flexible serán las palancas que nos impulsen hacia delante, ha añadido el ejecutivo. En este contexto, la firma, cuyas ventas en internet han crecido el 158 % en los últimos tres años, lanzará a finales de este mes una nueva tienda virtual que permitirá personalizar la experiencia de sus clientes online en función de sus compras en Europa, México y Estados Unidos.
La nueva web estará acompañada de un servicio, hasta ahora pionero en una marca de moda en Europa, consistente en la selección y envío de prendas a casa de los clientes a partir de un proyecto de inteligencia artificial asistido por estilistas de la compañía. Se trata del proyecto ADN que permite probar en casa y devolver o adquirir las prendas y complementos seleccionados por la plataforma y el personal shopper de cada cliente.
