El presidente de la Federación Galega de Comercio, José María Seijas, reconoció que el hecho de recuperar el horario habitual de funcionamiento es, sin lugar a dudas, una noticia “positiva” para este sector, pero también aclara que “no es suficiente” para que puedan remontar las ventas, muy mermadas a causa de las demás restricciones aplicadas para frenar la pandemia.
Desde esta medianoche está en vigor el levantamiento de algunas medidas para luchar contra la pandemia anunciado el pasado lunes el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, entre ellas, la vuelta del comercio a su horario habitual, con la excepción de los centros comerciales, que seguirán cerrados los fines de semana. En declaraciones a EFE, Seijas dijo que “recuperar el horario habitual es bueno” para el comercio, porque permite mantener los establecimientos “abiertos durante más tiempo” y así “los consumidores tienen más facilidades para hacer sus compras”.
Sin embargo, no espera que sirva para que las ventas repunten en este momento, porque las “demás restricciones” están afectando mucho también a la actividad comercial, como el cierre perimetral de los municipios, que limita la clientela de los comercios a la población de cada ayuntamiento.
“En Lugo, por ejemplo, no es suficiente, porque es una ciudad que vive también de los municipios que hay alrededor. En este momento solo pueden comprar los habitantes de la ciudad, pero esas ventas no son suficientes para mantener todo el entramado del comercio”, precisó Seijas. Asimismo, el presidente de esta asociación de comerciantes considera que también influye de forma negativa el cierre de la hostelería, porque no funcionan las habituales “sinergias” entre esos dos sectores.
