viernes. 29.03.2024

Cada día que avanza la campaña los partidos y dirigentes de las formaciones que se presentan a las elecciones no dejan pasar una sola oportunidad para intentar desgastar a sus adversarios o intentar sacar partido del más mínimo detalle para decantar el voto hacia su lado. Lo que digan los programas electorales, y lo que de ellos se diga en televisión, está bien; pero tan importante o más es el cara a cara en la calle con los ciudadanos.

 

Y también es fundamental hacer valer las posiciones cuando un paseo electoral hace coincidir a dos presidentes de Comunidad, ambos del PP, Alberto Núñez Feijóo y Cristina Cifuentes, con un "alcalde del cambio", Martiño Noriega, aunque sea para atribuirse el hecho de que en pleno diciembre en Compostela el cielo esté despejado y luzca el sol.

 

"Dando un paseíto, que hace un poquito de frío", se ha arrancado Cifuentes ante Noriega al cruzarse en la alameda de Santiago. "Hace un día maravilloso", le ha contestado el alcalde, a lo que la presidenta de la Comunidad de Madrid ha asentido: "La verdad es que lo del sol es una gozada".

 

"Está encargado", le ha replicado el alcalde, elegido por Compostela Aberta, y que apoya a la coalición En Marea, plataforma en la que se integran en Galicia Podemos, Anova, Esquerda Unida y varios movimientos ciudadanos.

 

Y eso fue más de lo que Cifuentes pensó que podía aguantar. Ahí se acabaron las coincidencias, por si acaso, y porque bastantes periodistas estaban recogiendo con sus cámaras el encuentro casual.

 

"El sol lo he traído yo, perdona", ha contraatacado Cifuentes, mientras que Noriega negaba con la cabeza y repetía: "No, no. Está encargado aquí".

 

Y de ahí a pedir el voto, pues un paso. Cifuentes agarró una de las papeletas del PP con la cara de Mariano Rajoy y se la ofreció al alcalde: "No sé si darte una".

 

"Ya la tiene", intervino Núñez Feijóo, ante lo que Noriega no dejó pasar la oportunidad: "No, no. Ese vicio ya lo dejé hace tiempo". Risas forzadas, ironía. Y pasa palabra, como en el juego televisivo. "Lo dejó hace tiempo", intentó seguir con la broma Núñez Feijóo, mientras que Cifuentes dejaba una puerta abierta:

 

"Efectivamente, no se puede saber..." Y llegó el momento de la despedida, había que buscar a votantes de verdad. Noriega les deseó "buena suerte y buena campaña" y se marchó, mientras que tanto Cifuentes como Núñez Feijóo le dedicaron un "adiós" sin emoción. Ya en la zona histórica de la ciudad, camino de la catedral, los dos dirigentes del PP y su comitiva se dedicaron a hacerse fotos con turistas, peregrinos y simpatizantes del PP.

 

Cifuentes tuvo tiempo incluso de comprarse unos pendientes en una de las muchas tiendas cercanas al templo, mientras Núñez Feijóo aguardaba fuera y seguía hablando con viandantes.

 

También se pasaron por la plaza de la Quintana, donde este domingo se abrirá la puerta santa, y allí un peregrino pidió a la presidenta de la Comunidad de Madrid hacerse una foto juntos.

 

"Para uno de Barcelona es difícil hacerse una foto con uno del PP", le dijo. También escucharon las críticas de algún comerciante cerca de la plaza del Toural por la presencia de "indigentes y borrachos, que hoy no están, los han quitado porque venías tú", le han dicho a Núñez Feijóo, al que le han pedido que se pase más por la zona.

El sol lo he traído yo, perdona