jueves. 28.03.2024

El Gobierno gallego ha iniciado hoy la tramitación del anteproyecto de la ley de regulación de aprovechamiento lúdico de las aguas termales de Galicia, que convivirá con la actual Ley de Balnearios. Según el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, se trata de una norma necesaria ante el auge del uso de este tipo de espacios.

 

Núñez Feijóo, en la rueda de prensa posterior al Consello de la Xunta, ha destacado que con la redacción de la nueva ley, el termalismo gallego "gana en seguridad, en blindaje legal y, por tanto, en potencial económico y turístico". El texto "pionero" en el Estado permitirá regular el uso de aguas termales que aportan beneficios para la salud, y con él, además, se cubrirá el "vacío legal" existente en cuanto a los espacios termales, en tanto que con la nueva normativa se definirá "qué se entiende por espacio termal".

 

Con esta nueva ley se completará la regulación en Galicia del uso de las aguas termales, ya que actualmente se limita a su aprovechamiento para una finalidad terapéutica. De este modo se establecerá una frontera clara entre las aguas termales destinadas a fines terapéuticos y preventivos y las destinadas a fines lúdicos y que ofrecen efectos beneficiosos para la salud, reguladas a través de esta nueva ley y que podrán ofrecerse a través de espacios termales y piscinas termales de uso lúdico. El anteproyecto de ley se ha presentado con cuatro objetivos principales que, en palabras del mandatario autonómico, son: velar por la salubridad e higiene de este tipo de aprovechamientos termales, garantizar la sostenibilidad ambiental de los mismos, proteger la integridad del espacio termal y promover el desarrollo económico y social de los municipios en los que se sitúan.

 

En este sentido, la ley pretende contribuir a impulsar la industria turística y ayudar al desarrollo local y regional mediante la generación de inversión y empleo, aspecto importante para la Comunidad puesto que Galicia cuenta con trecientas captaciones de aguas mineromedicinales, veintiún balnearios y cinco talasos que disponen de 3.000 plazas hoteleras, situando a la Comunidad como la primera potencia termal de España y la segunda de Europa.

 

Con ella, se configurará un nuevo mapa termal en Galicia en función de donde estén localizadas las aguas termales de uso lúdico, en función de si están en terrenos públicos, a las que se le concederán una concesión administrativa por treinta años prorrogable hasta un máximo de 75, o si están en terrenos privados, con proyectos indefinidos pero revisables cada diez años.

 

La propuesta también recoge el régimen de derechos y deberes de los titulares, así como el régimen de inspección y sanciones, cubriendo un "vacío legal" porque hasta la fecha "no había ninguna ley autonómica que exigiese" un seguro de responsabilidad civil o control sanitario, algo importante dado el auge en el uso de este tipo de espacios. No obstante, el presidente ha incidido en que la nueva ley no debe ir en contra de la viabilidad de los balnearios. La normativa, que comienza su tramitación, estará abierta al diálogo para su mejora y adaptación, tanto a las necesidades del sector como desde el punto de vista de la protección de este recurso natural, ha señalado.

 

En otro orden de cosas, el Gobierno gallego también ha aprobado el decreto que regulará el pionero Observatorio de los Ríos, un organismo de asesoramiento en la Comunidad sobre el estado ambiental, económico, social y cultural de los estados ambiental, económico, social y cultural de los ríos. Este instrumento pretende convertirse en la herramienta adecuada para obtener, de un modo transversal e interdisciplinar, información periódica y pormenorizada sobre el estado de los ríos gallegos, para lo que espera contar con una amplia y equilibrada participación de instituciones, asociaciones y expertos.

Galicia contará con la primera ley que regula el aprovechamiento lúdico de las aguas...