jueves. 28.03.2024

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido este miércoles en el Congreso el mantenimiento del estado de alarma, aunque "un estado de alarma distinto" como lo es la situación de la pandemia del coronavirus, hasta culminar la desescalada y alcanzar la "nueva normalidad".

 

Un día después de conocerse que el Gobierno sondea a los partidos para aprobar una nueva prórroga del estado de alarma que sea en esta ocasión de un mes y no de quince días y dure hasta finales de junio -cuando se espera que finalice la desescalada-, Sánchez ha apelado a la "unidad" en este periodo.

 

Lo ha hecho dirigiéndose al líder de la oposición, Pablo Casado, a quien ha reclamado dicha unidad política, pero el presidente del PP le ha repetido lo que viene diciendo en los últimos días, que su partido no va a apoyar una nueva prórroga de la alarma. "Hasta aquí hemos llegado".

 

Aunque el Gobierno no necesitó al PP en la votación de la cuarta prórroga al hacerse con el voto favorable del PNV y de Cs, Sánchez ha insistido en reclamar a Casado la unidad para afrontar lo que viene, porque según le ha subrayado es necesaria no sólo para salvar vidas sino también empresas y empleos.

 

Pero Casado ha comparado a Sánchez con José Luis Rodríguez Zapatero y esta crisis con la que gestionó el anterior presidente socialista y le ha acusado de utilizar la "misma propaganda" que la de entonces, y le ha exigido que explique si España va a pedir a Europa un rescate y cuánto va a costar.

 

Sánchez no ha entrado en la confrontación pese a considerar "fácilmente rebatible" el discurso de reproches de Casado y ha insistido en pedir unidad. Ha sido en su respuesta al portavoz del PNV, Aitor Esteban, cuando Sánchez ha defendido mantener ese "distinto" estado de alarma. El jefe del Ejecutivo ha vuelto a asegurar que para el Gobierno la alarma "es una necesidad y no un proyecto político" y ha insistido en que sigue siendo necesario para culminar esta etapa.

 

También ha salido al paso de las acusaciones de premiar al PNV -aliado en numerosas votaciones y que votó sí a la última prórroga- otorgando al País Vasco la fase 1. Y ha insistido en que han sido criterios "estrictamente técnicos y no políticos" los que llevaron a decidir las fases de todos los territorios del país. Después de Sánchez le ha tocado a Carmen Calvo defender el mantenimiento del estado de alarma como el instrumento más "garantista y democrático".

 

La vicepresidenta primera, encargada de hablar con los partidos sobre la próxima prórroga, ha vivido un duro "cara a cara" con la portavoz del PP, Cayetana Álvarez de Toledo, quien ha exigido su dimisión por "negligencia" ante la pandemia, que se cuenta "en miles de vidas rotas y millones arruinadas".

 

Y Calvo ha respondido pidiendo a la portavoz que cambie su "marco mental" de crítica al Gobierno para pasar a la cooperación. Calvo ha defendido en su respuesta al portavoz de ERC, Gabriel Rufián, que el Gobierno ha respondido "rápido" al coronavirus, pero el portavoz independentista le ha recriminado que muchas de las medidas aprobadas no se están cumpliendo.

 

Porque según Rufián, hay 700.000 personas que no han cobrado los expedientes de regulación de empleo temporales (ERTE) y 300.000 que no han recibido la prestación del paro, mientras que los créditos ICO están siendo utilizados con "usura" por la banca, que obliga a autónomos y pymes a comprar paquetes de pólizas de vida.

 

"Responder en tantas direcciones, tan rápidamente, de manera casi única en la historia de nuestro país no casa con la perfección", ha admitido Calvo, quien no obstante ha asegurado que "hay situaciones en las que algún ciudadano ha reconocido tiempo récord de una administración para reaccionar y cumplir lo que se dice".

 

La vicepresidenta primera comparece esta tarde en el Senado, donde podría dar algún detalle más de cómo quiere el Gobierno que sea esa quinta prórroga del estado de alarma.

 

En la sesión de control de este miércoles han sido muchos más los reproches que ha recibido el Ejecutivo, como el del secretario general del PP, Teodoro García Egea, en su rifirrafe con el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias. García Egea ha criticado al Gobierno por ocultar los nombres de los expertos que asesoraron para decidir el paso de fases.

 

"¿Por qué ocultan sus nombres? ¿Es porque están negociando con la salud de los españoles para mantener la poca salud que le queda al gobierno?", le ha dicho a Iglesias, a quien ha reprochado que insulte a otros populares como la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. Iglesias le ha replicado advirtiendo de que si el apartamento de lujo en el que vive Ayuso "lo está pagando un empresario" estaremos ante "un nuevo un caso de corrupción y la ciudadanía, en situación de pandemia, no lo va a consentir".

Sánchez defiende "un estado de alarma distinto" hasta culminar la desescalada