La conselleira de Sanidad, Rocío Mosquera, ha afirmado hoy que el problema de la hepatitis C no es "económico", sino "de criterios, de equidad" y de garantizar que todos los pacientes del Sistema Nacional de Salud tengan acceso "a los mismos tratamientos con los mismos criterios". Mosquera compareció hoy ante el pleno del Parlamento de Galicia en una sesión extraordinaria, un día después de que la Diputación Permanente aprobase la petición del grupo socialista para que la responsable de este departamento explicase la situación de la sanidad en Galicia, especialmente de las urgencias y del tratamiento a los enfermos de hepatitis C.
La responsable del departamento de la Xunta explicó la situación de dificultad en las urgencias, provocada por una mayor rapidez en el desarrollo de la epidemia de gripe de esta temporada sobre años anteriores; defendió la asistencia sanitaria "correcta" e indicó que el virus afectó principalmente a personas mayores, sin vacunar y con más de una patología.
Acerca de los pacientes con hepatitis, subrayó que todos los que cumplen con los criterios "están teniendo y seguirán teniendo" el tratamiento que precisan, y aludió a los "criterios" ya conocidos y que son los que se trabaja. En términos generales, la conselleira apuntó a la oposición en su conjunto que la sanidad pública "no se defiende con discursos catastrofistas y magnificando sus problemas" y destacó que el sistema de salud público imperante "no es perfecto" pero está "entre los mejores".
En este avivado debate, los portavoces de la oposición fueron unánimes en el concepto adjudicado como causa de la situación de las urgencias, un colapso, y también en que la "ausencia" de tratamiento a los enfermos de hepatitis C se debe a las políticas sanitarias y a los recortes practicados por los Gobiernos del PP. También se han posicionado de la misma manera al exigir la dimisión de la conselleira.
La socialista Carmen Acuña ha pedido a Rocío Mosquera que "deje de contar mentiras" porque en las urgencias hubo problemas que obedecen a otras razones y hay tres mil gallegos "desesperados, asustados, tristes e indignados que están esperando a que acabe usted de contarles mentiras y a que les lleguen las pastillas". "Suplican que no les llegue antes el fármaco de la muerte", ha reseñado Acuña, y tanto el PSOE, como el resto de grupos de la oposición, han aludido a la reciente muerte de un miembro de la Plataforma Gallega de Afectados, un vecino de Cangas (Pontevedra).
Carmen Acuña ha dicho desconocer el "interés" de Alberto Núñez Feijóo en mantener en su puesto a Rocío Mosquera, pero le ha dicho a ella directamente que lo mejor que puede hacer es irse, y en ello ha coincidido la nacionalista Montse Prado, quien le ha espetado que "como ejecutora de políticas letales, si tuviese dignidad debería marcharse para su casa".
Prado también ha cuestionado cuál es la equidad cuando el que tiene dinero puede curarse, pero aquellos que no cuentan con un colchón que se lo permita, no. "¿Usted le llama equidad a eso?", ha interpelado a la conselleira, que le ha contestado que no es cierto que estos medicamentos se puedan comprar "cuando hay dinero y no cuando no lo hay", porque estos fármacos "no están en las farmacias" a disposición de los usuarios para su uso libre.
La parlamentaria de Alternativa Galega de Esquerda (AGE), Eva Solla, ha lamentado que la conselleira argumente que no es un problema económico, cuando se evidencia que sí lo es, de manera que "lo que dijo es falso", y, por parte del Grupo Mixto, Carmen Iglesias ha exigido a Rocío Mosquera que no condene a gente "a una muerte certera" y Consuelo Iglesias ha asegurado que Rocío Mosquera podría hacerse con él "récord Guinness de la mentira".
El diputado del PPdeG Miguel Santalices ha recriminado las "sandeces" que escuchó, procedentes de los grupos de la oposición, las cuales replicó, y la presidenta del Parlamento, Pilar Rojo, le ha indicado que "los diputados no dicen sandeces, dan opiniones".
