viernes. 29.03.2024

El abogado de la asociación El Defensor del Paciente Cipriano Castreje, que ganó una demanda al Servizo Galego de Saúde (Sergas) por una demora diagnóstica y quirúrgica sufrida por un paciente que se vio obligado a recurrir a la sanidad privada, ha sugerido hoy que quien se vea en una situación similar "insista y reclame" hasta ser atendido cumpliendo los protocolos.

 

Castreje, que llevó el caso de un hombre de 62 años residente en Culleredo (A Coruña) que estuvo a punto de padecer una cojera grave e irreversible, ha explicado, en declaraciones a Efe, que "afortunadamente el paciente contaba con los recursos económicos suficientes como para poder pedir una segunda opinón en el mejor especialista neurocirujano que pudo pagarse". "En cuanto tuvo la segunda opinión, la cirigía fue inmediata.

 

Esto lo salvó de una paraplejia", ha asegurado tras ganar el caso, cuya sentencia es firme tras la consignación, ayer, de las cantidades de la condena, tanto la principal como los intereses, por parte de la aseguradora. El abogado detalla que "no todo el mundo tiene la misma oportunidad" que tuvo este paciente, por lo que cree que "no debe dejarse en manos del paciente" la responsabilidad de pedir y conseguir una cita a tiempo.

 

"Dadas las pruebas, que indican la gravedad de la dolencia, deben avisar al adjunto de guardia, que es lo que dice el protocolo del Sergas, que incumplieron", ha continuado. La única solución es "pedir, reclamar e insistir" hasta conseguir la atención adecuada, que es la que marca el protocolo en cada caso, pues en el que fue juzgado, al paciente ni siquiera le comunicaron "la gravedad" de lo que padecía.

 

La sentencia del pasado 11 de enero da la razón a este hombre, que debe ser indemnizado por el Sergas todos los daños y perjuicios que se le causaron como consecuencia de una demora diagnóstica y demora en la práctica de una cirugía de una hernia discal que exigía un tratamiento quirúrgico inmediato, relata El Defensor del Paciente. Aunque inicialmente le diagnosticaron una lumbalgia que no remitió ni con opiáceos, más tarde en urgencias del Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (CHUAC) determinaron correctamente la existencia de una hernia severa "que exigía como mínimo que fuese visto por un neurocirujano de guardia", explica la entidad. "Sin embargo, ningún neurocirujano le visitó y le remiteron a su domicilio, señalándole que pidiera cita en neurocirugía. Al día siguiente solicitó cita y se la dieron para dos meses más tarde. Dos días más tarde el dolor se agravó irradiando a los miembros inferiores con compromiso de movimiento del paciente y a través del teléfono solicitó que le adelantaran la cita", continúa. Debido a que no obtuvo respuesta, "el paciente acudió a la sanidad privada, donde le practicaron una resonancia magnética el mismo día y dos días más tarde fue operado con éxito", añade. El Defensor del Paciente demostró en el juicio la necesidad de que la cirugía se hubiese tenido que practicar ya el día en el que el paciente acudió urgencias. "Se demostró igualmente que la demora en la cirugía hubiese dejado al paciente con una cojera grave e irreversible. En la actualidad, tras la cirugía, el paciente deambula correctamente", subraya.

El abogado que ganó al Sergas por una demora quirúrgica sugiere insistir y reclamar