El nuevo concierto entre el Servicio Gallego de Salud (Sergas) y Povisa ha comenzado hoy con una vigencia de ocho años, más otros dos renovables actualmente, tras la firma del mismo por parte de la gerente María Nieves Domínguez y el consejero delegado del hospital vigués, Bernardo Silveira.
El Sergas abrirá a lo largo de esta semana el plazo para la libre elección de centro hospitalario para la población que tenga como centro de referencia a Povisa, y que permanecerá vigente hasta el 30 de noviembre, informó en un comunicado la administración autonómica. El nuevo concierto -el anterior expiró en 2010 y desde entonces permanecía prorrogado- establece una cápita de importe anual por paciente de 540 euros, mantiene la cartera de servicios actual y fija un tope de población adscrita de 139.000 personas.
El comité de empresa de Povisa, por su parte, apunta a la Xunta como "principal culpable" por "permitir" doce despidos en vísperas de la entrada en vigor del nuevo concierto sanitario y cuando la dirección del hospital privado vigués acaba de reconocer unos beneficios de 11 millones de euros.
La presidenta del comité de empresa, María Jesús Neira, ha tachado de "vergonzoso" e "indignante" que se vayan a la calle una docena de trabajadores indefinidos, algunos con más de diez años de experiencia, cuando en julio y agosto hubo nuevas incorporaciones a la plantilla de personal con peores condiciones laborales.
