sábado. 20.04.2024

Una de las decisiones económicas más importantes que tomamos a lo largo de nuestra vida es comprar una vivienda y hacerlo pasa –casi siempre– por la firma de una hipoteca.

 

Lo primero antes de comprar una vivienda es decidir un presupuesto orientativo de la vivienda que buscamos. Según apuntan diferentes expertos, la cantidad que se debe destinar a la compra de la vivienda, si se contrata una hipoteca, no debería superar el 35-40% de los ingresos netos mensuales.

 

Por lo tanto si has calculado el gasto que puedes asumir, lo siguiente es ponerte “manos a la obra” para buscar la zona donde quieres adquirir tu vivienda.

 

Llegados a este punto se suele valorar la cercanía de padres, familiares o amigos, el “estar en el barrio de toda la vida”, y otros aspectos como el acceso y los medios de transporte más próximos desde o hacia el puesto de trabajo, las tiendas, servicios de alimentación y centros de ocio, las guarderías, colegios e institutos si tenemos niños, los servicios sanitarios, zonas de aparcamiento, etc…

 

Hay que tener claras las prioridades, y más si se compra de segunda mano, porque nunca te va a gustar una vivienda al 100%. La clave es que tenga buena distribución, sea una buena finca y que te guste la zona. Debes tener en cuenta todos los aspectos y valorar lo que más te convenga.

 

Una vez tengas decidida la zona que te interesa y tener claro el precio orientativo de la vivienda que puedes comprar, es hora de buscar ofertas.

 

Para ello puedes dar una vuelta por la zona que te gusta, ya sea paseando o en coche, pues siempre puedes ver algún cartel en las ventanas de SE VENDE, o bien acudir a una agencia inmobiliaria de la zona para que nos oriente sobre alguna oferta o precios de la zona.

 

No está demás seguir otras pautas ya conocidas como leer anuncios clasificados de compraventa de viviendas en las revistas y la prensa local, navegar por Internet en busca de ofertas; hoy en día existe una multitud de webs donde podemos encontrar viviendas de todo tipo ya sean de particulares, promotores o bancos.

 

Si ya encontraste tu vivienda de ensueño, es hora de dar el siguiente paso, elegir una buena hipoteca. Acertar con la mejor no es sencillo, pero el esfuerzo merece la pena, pues te permitirá ahorrar dinero y evitar disgustos en un futuro.

 

La hipoteca nos acompañará durante mucho tiempo por lo que es de vital importancia elegir una que se adapte a nuestras necesidades y con la que corras el menor riesgo posible.

 

Cabe destacar que en este momento las condiciones son muy favorables para solicitar un préstamo hipotecario, podemos decir que vivimos en un “momento histórico”. El Euríbor, índice de referencia al que se revisan la mayoría de las hipotecas a interés variable, está muy bajo.

 

Tras una larga etapa en la que el mercado hipotecario quedó estancado, las entidades financieras han cambiado totalmente el escenario abriendo el grifo con una avalancha de ofertas. En definitiva, con la bajada del precio de los inmuebles, el Euríbor en mínimos históricos y la alta competencia entre bancos por ofrecer la hipoteca más atractiva, son muchos los que están optando por lanzarse a comprar una casa e hipotecarse.

 

 

¿Es buen momento para contratar una hipoteca?