jueves. 28.03.2024

La conselleira de Medio Ambiente, Beatriz Mato, ha visitado en A Coruña la Escuela de Hostelería Álvaro Cunqueiro, donde se están desarrollando acciones dentro de la campaña "No al desperdicio alimentario" que promueve el uso de fiambreras para poder llevarse la comida del restaurante.

 

Este proyecto piloto puesto en marcha por la Xunta se enmarca en el convenio firmado entre la Consellería de Medio Ambiente y las asociaciones provinciales de hostelería, con el fin de fomentar la economía circular y la lucha contra el cambio climático, informan fuentes de la Xunta.

 

El ahorro energético, de consumo de agua, la correcta gestión de los residuos y reciclaje, y la reducción del desperdicio alimentario forman parte de esta iniciativa, que espera contar con el apoyo de 1.300 locales, adscritos a la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de A Coruña.

 

Esta cultura de la reducción del desperdicio alimentario parte de ofrecer a los clientes la posibilidad de llevarse la comida no consumida en los locales para su aprovechamiento posterior en los hogares. Para ello, sostiene la Xunta, se proporcionará el apoyo necesario para la adquisición de fiambreras y bolsas ecológicas, que deberán ser biodegradables y reutilizables.

 

"Con estas acciones se evita que los alimentos se conviertan en residuos", ha destacado la conselleira, pues según los datos de la organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO), un tercio de la producción de los alimentos destinados al consumo humano se pierde y el desperdicio de comida genera un 8 por ciento de emisiones de gases de efecto invernadero.

 

Especialmente preocupante es la tasa de desperdicio de frutas y hortalizas, mucho más alta que las de cualquier producto alimentario, ya que supone casi la mitad de todas las frutas y hortalizas producidas y, en los países industrializados como España, los consumidores desperdician el 30 por ciento de los productos de cereales, 286 millones de toneladas anuales, detalla la Xunta.

 

La conselleira se ha referido también al consumo de agua y ha instado a hacer "un esfuerzo para reducir el consumo en la cuenca de A Coruña", que se encuentra en una situación "absolutamente excepcional", como las otras seis gallegas. Además de la ciudadanía ha incidido en la industria, gran consumidora de agua que se abastece de la traída municipal, por lo que ha aconsejado a los Ayuntamientos que, además de reducir baldeos y riegos, apelen a estas industrias para que, entre todos, "seamos serios y responsables" con el consumo del agua.

Una campaña promueve usar fiambreras para llevarse la comida del restaurante