viernes. 29.03.2024

El Gobierno gallego ha dado hoy el visto bueno a una inversión de 36 millones de euros para la ampliación de la denominada Tarjeta Bienvenida hasta los tres años de edad, si bien a partir del primer año los requisitos de renta serán más exigentes.

 

De este modo, según ha indicado el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, en conferencia de prensa tras la reunión semanal del Ejecutivo autonómico, la renta familiar en el primer año se mantendrá en 45.000 euros (o 13.500 per cápita hasta esa cantidad), mientras que en los años siguientes la renta familiar no podrá pasar de 22.000 euros. Según ha explicado, el primer año de funcionamiento (2016) la tarjeta, dotada con 1.200 euros al año, llegó a casi 15.000 bebés, el 78,3 % de los nacidos, una cifra que la Xunta espera consolidar este segundo año (2017) y situarse en el 80 por ciento de los nacidos.

 

El Ejecutivo autonómico aspira a seguir llegando a 4 de cada 5 nacidos el primer año, mientras que al endurecer el requisito de renta para los años posteriores, los beneficiarios bajarían a la mitad, aproximadamente, en ese periodo.

 

La ayuda de 100 euros al mes el primer año (1.200 anuales) se pagará en dos plazos a partir del próximo año, mientras que no se incorpore un sistema informático que permita comprobar cada tarjeta mensualmente debido al aumento de beneficiarios. Tras el primer año, las ayudas pasarán a ser de 600 euros para el primer hijo, de 1.200 euros para el segundo y de 2.400 para el tercero y sucesivos. La tarjeta está concebida para cubrir gastos de alimentación, farmacia y parafarmacia.

 

Según ha indicado el presidente gallego, las familias retornadas de la emigración durante 2018 podrán recibir también estas ayudas aunque su hijo naciese en 2017, ya que el plazo para solicitar la tarjeta será de dos meses desde que regresen. Núñez Feijóo ha opinado durante la conferencia de prensa sobre los datos demográficos conocidos esta semana, tanto el saldo vegetativo durante el primer semestre como la variación de población en la misma fecha. En este periodo Galicia ha perdido 6.500 habitantes, principalmente por un saldo vegetativo negativo de casi 7.500 personas.

 

Ha asegurado Feijóo que el problema demográfico es estructural, no sólo de Galicia ni del noroeste de España, sino de buena parte de los países europeos.

 

Según Núñez Feijóo existe "cierta tendencia" a mitigar "datos dramáticos", con una "ligera mejoría", por ejemplo en el número de hijos por mujer fértil ya que en el año 2000, "en plena bonanza económica", era un 0,95 mientras que el año pasado fue de 1,12, lo que supone "una mejoría". Por otra parte, la Xunta ha dado hoy el visto bueno a la renovación del bono social de vivienda, con el que ya ha atendido a 467 familias y con el que aguarda atender a unas 600 durante 2018.

La tarjeta Bienvenida de la Xunta se amplía a tres años con requisitos más exigentes