viernes. 19.04.2024

Cada año se incautan en España pistolas y escopetas que se poseen o se usan de manera ilícita. El año pasado se cometieron 2.981 infracciones penales con armas de fuego en el país, según datos del Ministerio de Interior. Ahora, casos como el triple crimen machista de Valga (Pontevedra) abren el debate sobre la posible existencia de un mercado negro de armas en Galicia.

 

El arma corta usada en dicho asesinato era un revólver del calibre 32, nuevo, sin numeración y adquirida supuestamente de forma ilegal, pues el autor confeso no tenía licencia de armas, según informó el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada. La Guardia Civil explica a Efe que el número de armas ilegales en Galicia "es un dato desconocido", si bien "todas las transacciones (compra-venta) en las que las Intervenciones de Armas y Explosivos intervienen están dentro del circuito legal".

 

A pesar de que en conocidos portales de compraventa de internet se publican ofertas de armas de fuego, para poseerlas es necesario tener una licencia para la cual se exige presentar un "informe de aptitudes psicofísicas" y un "certificado de antecedentes penales en vigor", informan las mismas fuentes. No obstante, en el conjunto de España se cometieron 456 delitos de tenencia de armas, municiones y/o explosivos, una cifra similar a la del año anterior, cuando se registraron 468 delitos de este tipo, según datos facilitados a Efe por el Ministerio de Interior.

 

Con todo, en mayo la Guardia Civil de Pontevedra sacó del mercado negro un total de 84 armas ilegales que estaban ocultas en una finca del municipio de Ponteareas y se incautó con ellas de 3.411 cartuchos metálicos de diferentes calibres. La operación, denominada Iceberg, se saldó con la detención del sospechoso -que solo tenía el permiso de armas de tirador deportivo- como presunto autor de los delitos de depósito de armas de guerra, tenencia ilícita de armas prohibidas y depósito de municiones.

 

Entre el arsenal intervenido, se encuentran diez armas de guerra (tres subfusiles, tres fusiles de asalto, dos ametralladoras, un fusil ametrallador y una pistola ametralladora), que destacan por su peligrosidad, y además 66 armas cortas. Todavía se desconoce la procedencia de este material, pero la Guardia Civil puntualiza que no se puede atribuir este hecho al supuesto de que las personas con licencia compren armas por internet y las almacenen, pues "de forma genérica" se puede decir que a los poseedores de una licencia de armas "se les exige buena conducta."

 

El solicitante de una Autorización Administrativa de arma de fuego tiene que presentar una solicitud en la Intervención de Armas y Explosivos correspondiente a su domicilio. Entre los requisitos, también figura el de la entrega de la fotocopia del documento nacional de identidad en vigor o, en su caso, de la tarjeta de autorización de residencia, que será cotejada con su original y devuelta al interesado.

 

Además de lo anterior, "el solicitante de una licencia tipo F o tiro deportivo, tiene que estar federado y presentar la correspondiente Licencia Federativa", precisan fuentes del departamento de Intervenciones de Armas y Explosivos de la Guardia Civil de A Coruña. Desde el cuerpo de seguridad aseguran que se lleva a cabo un control periódico de las personas que tienen la autorización administrativa "de forma ordinaria cada cinco o tres años, dependiendo del tipo de licencia de armas, así como las extraordinarias que se crean necesarias".

 

De las personas que se tiene conocimiento que hayan cometido presuntos actos delictivos, que están implicados en hechos que podrían ser constitutivos de infracciones penales o cuya conducta suponga un riesgo propio o ajeno no acorde con la que debe de tener el titular de una licencia de armas, se vuelve a valorar dicha conducta antes de otorgar o renovar un permiso de armas.

Armería clandestina en Galicia