viernes. 19.04.2024

La flota atunera española agrupada en la organización Opagac ha pedido a la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (Iccat) que cambie el modelo de gestión para el atún tropical del océano Atlántico, de cara a la reunión que celebrará la próxima semana en Palma de Mallorca. En un comunicado, el director general de Opagac, Julio Morón, ha apuntado que, a su juicio, la Iccat se enfrenta este año al "gran reto" de decidir una fórmula de "gestión eficaz" para esa pesquería y, en especial, la del atún patudo. En este sentido, ha animado a la Comisión Internacional a "coger las riendas" y proponer un sistema que no dependa de controles de captura.

 

En su opinión, las capturas de patudo, rabil y listado por un gran número de países y su comercialización en un mercado "muy heterogéneo" han dificultado su gestión, con problemas para controlar las capturas por parte de algunos miembros sujetos a cuotas, los descartes -"raramente declarados"- y los aumentos pesqueros registrados por parte de países no sujetos a regulación.

 

La Iccat establece límites para el patudo desde hace más de cinco años, pero eso no ha impedido que las capturas aumenten "muy por encima" de los niveles adoptados, a causa de su "ineficacia y la complejidad del sistema de control", según Opagac. La próxima reunión del Iccat plantea mantener el actual sistema de gestión para hacerlo "más inclusivo", lo que para Morón es una postura "lógica" que, no obstante, puede tener unas consecuencias "nefastas" para las flotas europeas.

 

En el caso de España, la cuota de patudo podría reducirse a la mitad de lo que representaba originalmente en sólo cuatro años. Morón ha considerado que "no es justo" que la flota española, con un sistema "rígido" de control, tenga que afrontar ese recorte para "satisfacer" las necesidades de otros miembros que han sobrepasado sus cuotas o han pescado "indiscriminadamente en años de vigencia de los TAC".

 

Desde Opagac, han defendido la gestión basada en contar barcos frente a las capturas, por ser "más fácil" y "más eficaz" para cumplir con los objetivos de una gestión integral de los cuatro stocks de túnidos tropicales. Sólo mediante este enfoque y el control de la capacidad de flota será posible asegurar la recuperación del patudo y mantener el buen estado del resto de las especies, han insistido. Por su parte, la compañía Balfegó, especializada en atún rojo, ha solicitado que se intensifiquen los controles en la cadena comercial de esa especie, tras la primera campaña de pesca realizada bajo un plan de gestión.

 

Balfegó reclama la implantación obligatoria del certificado electrónico "eBCD" en toda la Unión Europea para el comercio de piezas enteras de dicha especie. Este certificado, según la compañía, documenta cada ejemplar de atún rojo capturado y comercializado, e incluye información sobre punto de partida, destino y receptor de cada pieza, lo que permitiría comprobar su legalidad en cualquier punto del recorrido.

 

Por otra parte, y ante la recuperación de las poblaciones de atún rojo "hasta alcanzar niveles de biomasa históricos", valora pedir a la Iccat un adelanto del inicio de la campaña para tratar de evitar concentraciones grandes de ejemplares. La XXVI reunión de la Iccat se celebrará en Palma de Mallorca del 18 al 25 de noviembre y será inaugurada el próximo lunes por el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, en funciones, Luis Planas.

Atuneros piden a la Iccat que cambie el modelo de gestión para atún tropical