El Juzgado de Instrucción 1 de Pontevedra ha decretado prisión provisional comunicada y sin fianza para el hombre que reconoció haber acuchillado y causado la muerte al marido de su expareja en Ponte Caldelas. Marcos V.G. es investigado por un delito de homicidio, informaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Galicia.
El autor confeso del crimen del pasado sábado fue dado de alta esta mañana en el Complejo hospitalario de Pontevedra, donde permanecía ingresado en la unidad de Psiquiatría. Marcos V.G. fue detenido el sábado después de apuñalar hasta la muerte a Manuel Ángel R.V. y confesar el crimen a la Guardia Civil.
El suceso se produjo en una vivienda de la calle México de Ponte Caldelas, donde residían la víctima y su mujer, con la que el detenido había mantenido una relación sentimental, en un tiempo en el que este matrimonio estuvo separado. Prácticamente a la misma hora que pasaba a disposición judicial más de doscientos vecinos de Ponte Caldelas reprobaban el crimen con un minuto de silencio.
En este municipio "todo el mundo está consternado", ha dicho el alcalde, el socialista Andrés Díaz. En Ponte Caldelas ha habido hoy un acto de condena de la mañana "negra y trágica" del pasado sábado en la que, según el alcalde, la población se enfrentaron a "cuestiones" que "asustan en las noticias", pero: "no te imaginas que puedan suceder aquí".
El regidor comentó que tuvo que comunicar a la madre del fallecido la luctuosa noticia y que esto supuso "un mal trago", lógicamente, sobre todo al tratarse de "vecinos de aquí, con familias grandes", y a los que ha visitado en sus respectivos domicilios.
El Ayuntamiento, en una reunión plenaria convocado con carácter de urgencia, ha decretado tres días de luto oficial y ha puesto los equipos de psicólogos a disposición de las familias, puesto que están "muy afectados todos, desconsolados, no lo esperaban para nada", comentó. Tampoco Sandra, casada con la víctima, una mujer oriunda del municipio vecino, de Fornelos de Montes, esperaba esa tragedia y se encuentra "totalmente desconsolada", añadió.
En el manifiesto al que se ha dado lectura, se ha mostrado la "repulsa a la violencia, venga de donde venga" y se ha arremetido contra un "comportamiento execrable y vergonzoso para la condición humana, que muestra el fracaso de los valores sociales que deben sostener la sociedad del siglo XXI que entre todos estamos construyendo".
"Desde lo más profundo de nuestro corazón", reza el texto, "repudiamos la intolerancia y reivindicamos la libertad de elección de las personas y la capacidad de decidir libremente sobre sus vidas". No hay causa, prosigue el documento, que pueda ser legitimada a través del uso de la violencia, la que ha segado la vida de Manuel Ángel Rivas Muíños, al que en su círculo íntimo llamaban Manolán, y que era "conocido y querido por todos".
Ponte Caldelas, ha subrayado el alcalde, está "entristecida y rota por el dolor de unas familias víctimas de la violencia" por lo que, con esta "rabia contenida", el pueblo "grita y tiene que gritar sin complejos: no a la violencia". Marcos V. G. confesó a la Guardia Civil haber apuñalado hasta la muerte a Manuel Ángel R. V. y está pendiente su paso a disposición judicial.
