viernes. 19.04.2024

La portavoz del Gobierno local del Ayuntamiento de Santiago, María Pardo, una de los siete ediles juzgados hoy por prevaricación, ha argumentado ante el tribunal que, en un primer momento, le pareció "un error político enorme" la solicitud del edil imputado en la Operación Pokemon de pagar con fondos públicos su defensa. No obstante, subrayó que la junta de Gobierno, que tomó el acuerdo, no podía prejuzgar si el edil Adrián Varela era inocente o culpable, y que únicamente se reconocía hacia él su derecho a la defensa.

 

Al igual que otros ediles que comparecieron con anterioridad, Pardo argumentó que la decisión no supondría gasto público salvo en el caso de que finalmente fuese avalado por el Ayuntamiento cuando hubiese sentencia. El Ministerio Fiscal ha insistido en que este extremo no figura en el acuerdo tomado por la Junta de Gobierno y también en que el informe del secretario en el que se basaron los ediles para sufragar con fondos públicos esta defensa citaba tres condicionantes que no fueron tenidos en cuenta. Tras concluir la declaración de Pardo, la vista sigue ahora con el testimonio de la edil María Castelao.

 

Siete de los trece concejales del grupo de gobierno popular, para quienes el fiscal pide nueve años de inhabilitación, son juzgados este lunes por un presunto delito de prevaricación, tras haber autorizado en junta de gobierno sufragar con fondos municipales la defensa del concejal de Deportes Adrián Varela, quien al final renunció a costearla con cargo al erario público.

 

A la llegada de los ediles a primera hora de esta mañana a los juzgados compostelanos de Fontiñas se produjeron momentos de tensión, al ser increpados y llamados corruptos por parte de los participantes en dos protestas minoritarias que se concentraron a la entrada de las dependencias judiciales. Otro grupo pequeño de personas aplaudió a los concejales a su entrada. El alcalde popular de Santiago, Angel Currás, fue uno de los increpados, al acudir a la vista para mostrar su confianza y apoyo a sus compañeros, tal y como había anunciado la pasada semana.

La portavoz del gobierno de Santiago vio al inicio un "error político enorme"