El alcalde de Vigo y candidato a la reelección, el socialista Abel Caballero, apunta a su tercer mandato consecutivo al frente de la corporación local en las elecciones municipales del 24-M, las más concurridas en la ciudad olívica con 17 opciones diferentes.
Un síntoma de que Vigo es una de las plazas más deseadas por su condición de ciudad más poblada de Galicia, como también el hecho de que esté constantemente presente en todo discurso político que se precie de unos meses a esta parte. Aspira Caballero a obtener su primera victoria por mayoría absoluta en las urnas y romper así la hegemonía del PP, la fuerza más votada en todas las elecciones celebradas en Vigo.
El PP ha confiado en la exconselleira de Hacienda Elena Muñoz el reto de rebajar el desgaste por medidas impopulares tomadas en Santiago y en Madrid, y de minimizar el desencanto entre sus votantes en la ciudad olívica por el pacto presupuestario con el PSOE. Los populares justifican aquel movimiento en el intento de desbloquear los "grandes proyectos", como el nuevo hospital, el transporte metropolitano o la Ciudad de la Justicia, y desacreditar el mensaje de "discriminación" hacia Vigo que proclama Caballero, cuya otra principal baza electoral son las reformas de calles.
Parece poco probable que socialistas ni populares, si no alcanzan la mayoría absoluta, vayan a poder cerrar un pacto con las otras formaciones que obtengan representación en la corporación, que a tenor de las única encuesta publicada hasta la fecha podrían ser BNG, Ciudadanos y Marea de Vigo. Está por ver el impacto de los partidos emergentes que aparecen bien posicionados en los sondeos a nivel nacional, aunque en el caso de Vigo el abanico se reduce a Ciudadanos, ya que Podemos no logró movilizar a su militancia para decidir si concurría con la Marea, cuya candidatura encabeza el coordinador local de EU, Rubén Pérez.
El BNG, que hace dos mandatos formó bipartito con el PSOE, y en el que recién finaliza apoyó la investidura de Abel Caballero y se mantuvo en la oposición, tiene como punta de lanza a Serafín Otero, exsecretario comarcal de la CIG, cuyo objetivo de mínimos es repetir los tres concejales de 2011.
Con respecto a hace cuatro años solo repite como candidato Caballero, además de Rubén Pérez, aunque entonces éste último lo hizo bajo las siglas de EU, que se quedó al borde del 5 % exigido para tener representación en la corporación. El candidato socialista ha apostado básicamente por la continuidad en su lista, pues mantiene en los puestos de salida a todos los actuales concejales, incluido el imputado Ángel Rivas.
Las principales novedades del equipo de Caballero son la exconselleira durante el bipartito en la Xunta María José Caride y la actriz Uxía Blanco. En el PP, José Manuel Figueroa, presidente de la agrupación local, se mantiene en el tercer puesto de la lista de su partido tras Elena Muñoz y el presidente de Novas Xeracións, Diego Gago. Del resto, caras nuevas, tanto en el BNG, donde Serafín Otero toma el testigo de Santiago Domínguez, como, sobre todo, en Ciudadanos, que deprisa y corriendo ha formado su candidatura, al frente de la cual está Jorge Portela.
Completan el abanico de aspirantes a la alcaldía de Vigo Comunistas de Galiza-PCPE; Agrupación Democrática de Centro de Galicia; Partido Animalista; UPyD; Partido Humanista; Gañemos Vigo; Compromiso por Galicia-Concellos Transparentes; Movimiento Red; Partido Coalición Galega; Agrupación Electoral Recortes Cero; Equo-Piratas e Iniciativa Independiente.
