sábado. 20.04.2024

La sección primera de la Audiencia Provincial de A Coruña ha aplazado el juicio por el presunto secuestro de un ciudadano subsahariano en 2004 debido a que se encuentra en paradero desconocido. Siete acusados estaban citados hoy en sede judicial para enfrentarse a un proceso contra ellos que terminaría mañana, pero este hecho ha impedido que se celebre la vista oral. La ausencia de la supuesta víctima, un varón subsahariano que había sido citado, ha provocado la decisión del tribunal de aplazar la sesión para agotar todas las posibilidades de encontrarlo y esperan un nuevo señalamiento antes del verano.

 

Las defensas opinan que esta posibilidad les perjudica de manera clara, pues no podrían interrogar al testigo fundamental del caso, lo que piensan que perjudica a sus clientes. El fiscal cree que los acusados retuvieron al ausente durante varias horas en una casa de Centroña, en la localidad coruñesa de Pontedeume, para después introducirla en el maletero de un coche, del que fue liberada tras sufrir un accidente en la A-6 ya en la provincia de Lugo. Los hechos por los que los siete acusados deben ser juzgados por la supuesta comisión de un delito de secuestro y falta de lesiones ocurrieron presuntamente en julio de 2004, por lo que las defensas hablan de un atenuante "claro" de dilaciones indebidas.

 

En su calificación previa, la fiscalía opina que los acusados ataron, taparon la boca y golpearon a la víctima en una casa de Centroña con la intención de que les diese un dinero que supuestamente les debía. La víctima, con la que se habían reunido en el barrio coruñés de Matogrande con la excusa de tratar de un negocio, fue rescatada del maletero de un coche que conducían los acusados y que abandonaron al sufrir un accidente en la A-6, en el término municipal de Baralla, en Lugo. El fiscal pide para uno de los acusados, al que aplica la agravante de precio, diez años de prisión, y nueve para el resto, aunque ofrece llegar a un acuerdo por no menos de seis porque considera que hubo abuso de superioridad. José Ramón Sierra representa a uno de los acusados y ha opinado ante los medios de comunicación que "once años después ha habido tiempo más que de sobra para poder averiguar dónde se encuentra esta persona".

 

"El testigo básico y fundamental, la víctima de los hechos, la persona presuntamente secuestrada a la que meten en el maletero y a la que supuestamente se le reclama una cantidad de dinero para ser puesta en libertad, no ha comparecido, no lo ha hecho porque no ha sido citado y no ha sido citado porque no ha sido hallado", ha dicho. En ese sentido, ha relatado que "la ley prevé que se dé lectura a sus declaraciones en su ausencia siempre que hayan sido tomadas con todas las garantías, que estuvieran todos los abogados presentes, que estaban", aunque primero deben agotarse las posibilidades de localizarlo.

 

"La ley también prevé que es función de la Administración de Justicia averiguar el paradero de esta persona y agotar todas las alternativas de sus domicilios. Intentaron citarlo en su domicilio de Madrid, allí no se le encontró", ha agregado. Por eso "habrá que oficiar al resto de la policía en todo el territorio nacional, por no decir a la Europol y a la Interpol, para ver dónde está esta persona, si está viva o muerta, poderlo citar y poder ejercer el derecho de defensa". "Si no es hallado el juicio se celebraría sobre las declaraciones que hizo esta persona. Se haría con una absoluta indefensión porque no podemos interrogar a quien afirma una cosa que es la base de la acusación. Sin el testigo no debería haber juicio", ha terminado.

 

Aplazan un juicio por secuestro en A Coruña ante la ausencia de la víctima