viernes. 29.03.2024

El Ayuntamiento de Lugo ha aprobado este miércoles en Junta de Gobierno la adjudicación de las obras del edificio Impulso Verde por 1,5 millones de euros, el primer edificio público de Galicia construido totalmente con madera autóctona certificada y una actuación que supondrá “la semilla del primer barrio multiecológico de España”. Esta zona sostenible se levantará en la zona Garaballa en el marco de la estrategia Life Lugo + Biodinámico, que lidera el Ayuntamiento en colaboración con la Diputación de Lugo, la Universidade de Santiago de Compostela y la Universidad Politécnica de Madrid.

 

La empresa adjudicataria de los trabajos ha sido Egoin S.A. y el plazo de ejecución de las obras será de 15 meses. La alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, destacó que “el Impulso Verde se convertirá en un referente en la lucha contra el cambio climático, apostando por un nuevo modelo constructivo más respetuoso con el medio ambiente, pero también será un revulsivo económico, pues con este proyecto se busca dinamizar el sector forestal gallego y contribuir a su empuje”. En este sentido, recordó que el proyecto de construcción de las ciudades sostenibles del futuro apuesta por “el uso de la madera como elemento estructural”. Méndez señaló que este modelo de construcción implicará un ahorro de consumo energético de un 7 4% con respecto a edificios de oficinas ya existentes, y de un 54 % con respecto a los de nueva construcción. En lo relativo al dióxido de carbono (CO2), el edificio emitirá un 90 % menos que los edificios de hormigón y acero -50 toneladas frente a 470-, y, además, absorberá 280 toneladas de emisiones.

 

El Impulso Verde está diseñado con un sistema de estructuras laminares reticulares de eucalipto para su aplicación en cubiertas, y un panel de madera contralaminada de pino radiata para su aplicación en edificación en altura. En cuanto a las innovaciones, será un edificio de balance energético casi cero, es decir, será capaz de producir con energías alternativas su consumo. Cuando esté construido, se monitorizará para evaluar su rendimiento y detectar, incluso, si puede producir más energía de la que consume. Desde un punto de vista espacial, el edificio conectará al usuario con la naturaleza a través del empleo de la madera y de la inserción de espacios ajardinados, destinados al descanso y la distensión, ya que estará rodeado de un nuevo parque con pavimentos drenantes, especies autóctonas, jardines de lluvia y una amplia zona de huertos urbanos. En cuanto a sus usos y funciones, el Impulso Verde albergará servicios municipales, además de un coworking para empresas relacionadas con el medio ambiente y el cambio climático.

Lugo avanza en la construcción del primer barrio multiecológico de España