sábado. 20.04.2024

Una superviviente del gueto de Terezín y del campo de concentración de Auschwitz, Dagmar Lieblová, que se encuentra en Santiago de Compostela para asistir a la representación de una ópera símbolo de la resistencia frente al nazismo, consideró "peligroso" el auge de la xenofobia y el racismo. Lieblová, de nacionalidad checa, nacida en 1929 en la región de Bohemia, fue deportada en junio de 1942 junto a su familia judía a Terezín y, durante su reclusión en ese gueto frecuentado por intelectuales y artistas, participó junto a otros niños en la interpretación de la ópera infantil "Bundibár" (El abejorro).

 

La obra, cuya música es de Hans Krása y el libreto en checo de Adolf Hoffmeister, que fue interpretada más de medio centenar de veces en ese campo de concentración y que fue utilizada por el régimen nazi para simular una atmósfera de normalidad, se ha convertido en un símbolo frente a la opresión.

 

Traducida al gallego, la ópera será interpretada mañana en el teatro Principal de Santiago de Compostela con la colaboración de la Asociación de amigos de la ópera. Lieblová, que fue recibida por el alcalde de Santiago de Compostela, Martiño Noriega, dijo estar "sorprendida" por la invitación de la capital gallega, de la que confesó tener una "impresión muy gratificante" por la decisión de representar esa ópera, que espera que sea "un acontecimiento maravilloso" Indicó que la representación en su infancia de esa obra en el gueto de Terezín, en terribles condiciones de sufrimiento para decenas de miles de judíos, para los niños "en aquellos tiempos significada un cuento de hadas sobre la vida".

 

"Las impresiones que tuve entonces no se pueden borrar", confesó, pero añadió que "han pasado muchos años y el resto de mi vida la he vivido feliz", hasta el punto de que incluso el sufrimiento y las heridas de ese período "creo que de alguna manera están cerradas". Al ser preguntada sobre el auge de la xenofobia y el racismo en algunos países occidentales, Lieblová respondió brevemente que representan una "tendencia muy peligrosa" y consideró que "la Europa actual debe saber solucionarlas".

 

Lieblová y sus familiares fueron deportados en diciembre de 1943 al campo de concentración nazi de Auschwitz, donde murieron sus padres y su hermana. El alcalde de Santiago de Compostela consideró la representación de la ópera en la capital gallega como un "ejercicio de memoria saludable", especialmente "en los momentos difíciles que se están viviendo en Europa" y por la "carga simbólica" que tiene la obra.

Superviviente de Terezín y Auschwitz ve "peligroso" el auge de la xenofobia