viernes. 19.04.2024

La sección sexta de la Audiencia Provincial de A Coruña, con sede en Santiago, ha dejado hoy visto para sentencia un juicio por un delito continuado de apropiación indebida, en el que el Ministerio Fiscal retiró los cargos contra el acusado por no presentarse la mujer denunciante de los hechos.

 

Al procesado, Francisco González, se le acusa de haber retirado más de 27.000 euros de las cuentas bancarias de su tía sin consentimiento, ya que actuando con ánimo de enriquecimiento injusto, aprovechando la circunstancia de llevarse a convivir con él a su tía, a su domicilio ubicado en Boiro, el acusado la convenció para que lo incluyese como titular en sus cuentas bancarias, retirando de las mismas la cantidad total de 27.436 euros. La vista por este caso debía haberse celebrado el pasado diciembre, pero no fue así porque la denunciante no acudió a testificar aduciendo que se trata de una mujer de avanzada edad, sin capacidad para transportarse desde su residencia hasta las dependencias judiciales.

 

Además, se da la circunstancia de que el propio acusado es quién se encarga de cuidar de la demandante y de ayudarla en todo tipo de labores, como las visitas al médico, la compra del supermercado, y el cuidado en el hogar, que visita diariamente y por ello quien debería haberla llevado al juzgado de Santiago. Sin embargo, la mujer tampoco acudió hoy a la vista. De este modo, el Ministerio Fiscal retiró su acusación al dar por válidas que el dinero retirado pudiese ser empleado, como argumentó el acusado, para invertirlas en los gastos de la mujer que no era capaz de costear con la pensión que ella percibía mensualmente.

 

El dinero también habría sido empleado en la construcción de un muro en la casa de la mujer acordado con un vecino, ya que el existente estaba medio derruido, y en distintas obras de acondicionamiento de esta vivienda. Sin embargo, la letrada de la acusación particular elevó sus peticiones a definitivas mientras que la defensa solicitó la libre absolución de su patrocinado. El procesado empleó su último turno de palabra para decir que él se hizo cargo de su tía desde el momento en el que ella lo llamó para decirle que estaba "muriéndose" en la residencia y precisaba de su ayuda.

Visto para sentencia un juicio por estafa al que la demandante no asistió