El departamento de Conservación y Explotación de Carreteras del Estado, dependiente del Ministerio de Fomento, ha iniciado hoy los trabajos de mejora de la seguridad vial en la carretera N-651 a su paso por las curvas de Santa Ana, en Fene (A Coruña), uno de los principales puntos negros de la provincia.
En un comunicado, el Ayuntamiento fenés ha recordado que la zona contabilizó 38 accidentes en los últimos cuatro años. Como consecuencia, hubo 9 heridos y 3 fallecidos, registrándose la última víctima mortal en septiembre pasado. Con este plan, el Gobierno central procederá a la "eliminación de uno de los carriles de subida, la instalación de una mediana de cemento y la reducción de los límites de velocidad".
El gobierno local de Fene ha desvelado que también ha pedido "la tala de varios árboles que dejan sombra y hojas sobre la carretera, convirtiendo el firme en una pista de patinaje durante buena parte del año". A su juicio, "las obras responden en buena medida a las solicitudes municipales, reflejadas en un informe sobre siniestralidad elaborado por la Policía Local".
"Los agentes recomendaban la separación física de ambos carriles con una mediana de hormigón o con un quitamiedos para evitar colisiones entre el tráfico de subida y el de bajada", ha esgrimido el Ayuntamiento de Fene. Además, propusieron "la instalación de barreras laterales semirrígidas en todo el trazado de la curva con mayor siniestralidad y la reducción del límite de velocidad en ese tramo". Finalmente, Fomento ha acordado suprimir el carril de adelantamiento de subida, por lo que la carretera "pasará a tener solo dos carriles". Entre ambos, ha indicado el consistorio fenés, habrá "una barrera de cemento para la contención de vehículos".
La Demarcación de Carreteras arguyó que así pretende "evitar los accidentes frontales y frontolaterales por salidas de vía". Asimismo, el personal de obra ya ha cambiado en la mañana de hoy la señalización de velocidad, que pasa de 70 a 50 kilómetros por hora en ambos sentidos. El alcalde de Fene, Juventino Trigo, ha deseado que las medidas "den el resultado esperado", pero ha censurado que Fomento no comunicase "en tiempo y forma" el arranque de los trabajos.
"Fue el viernes cuando nos llamaron para decirnos de palabra que hoy iban a comenzar; lo importante es que se hagan ya, pero consideramos que la Demarcación de Carreteras debería haber contactado antes con nosotros", ha criticado. La faena se prolongará, en principio, hasta el próximo miércoles, obligando a regular el tráfico en la zona, en la que se pide precaución estos días.
