Varias dotaciones de policía, con la ayuda de ciudadanos particulares, evitaron la pasada madrugada que un hombre de 38 años de edad se tirase al vacío desde el nuevo puente de Lugo -sobre el río Miño-. Los hechos ocurrieron en torno a la una de la madrugada, cuando una llamada a la comisaría alertó a los agentes de que dos personas tenían sujeto a un hombre de 38 años que pretendía arrojarse al vacío, pero ambas estaban "agotadas de sujetarlo y temían por su vida".
Hasta el lugar se desplazaron cuatro patrullas policiales y los agentes, tras relevar a los dos ciudadanos que lo tenían sujeto, lograron "izarlo a pulso" y "ponerlo a salvo en la cacera". "Debido a la violencia que ejercía, los lloros y el estado de alteración, persistiendo en atentar contra su vida, hubo, llegado el momento, que ponerle los grilletes con el fin de que no se hiciese daño", precisó la Comisaría Provincial en un comunicado.
El hombre fue trasladado al HULA, acompañado en todo momento por dos agentes de policía, donde los servicios médicos lograron estabilizarlo. El hombre quedó ingresado en observación psiquiátrica.
