El forense ha confirmado que los restos humanos hallados entre los escombros que dejó el incendio de Bóveda pertenecen a dos personas diferentes, aunque ahora se les practicará la correspondiente prueba de ADN para verificar por completo la identidad de los cadáveres.
Después de dos días de trabajo, los Bomberos de Monforte de Lemos han suspendido esta mañana la búsqueda de los restos mortales de los dos ancianos que vivían en la casa que ardió el pasado lunes en Bóveda, en el lugar de A Raíña, en la parroquia de Martín.
La responsable del parque de Bomberos, Mar Domínguez, confirmó que esta mañana revisaron lo que quedó de la cocina del inmueble, pero no hallaron en ese lugar estos humanos, por lo que dieron por suspendida la búsqueda a la espera de nuevas órdenes.
En los últimos días, los bomberos contaron en esos trabajos de búsqueda con el apoyo de la Guardia Civil y de perros adiestrados de la Asociación de Cans de Rescate de Galicia, así como con la ayuda de una excavadora, que participó en los trabajos de desescombro. Durante esos trabajos de desescombro hallaron parte de los restos mortales de una persona, pero no encontraron el cadáver de una segunda. Las víctimas cuyos cadáveres buscaban los equipos de rescate son José Carballada Méndez, de 95 años, y su mujer, María Virginia Martínez, de 89.
