Un jugador del equipo de veteranos de Montouto -con iniciales F.C.C-, en el municipio lucense de Abadín, aceptó este jueves una pena de un año y seis meses de prisión por propinarle un puñetazo en la boca a un árbitro que le sacó tarjeta amarilla en el transcurso de un encuentro. El juicio quedó visto para sentencia en la Audiencia Provincial de Lugo después del acuerdo alcanzado entre la defensa y el ministerio fiscal, que inicialmente pedía tres años y medio de cárcel para el acusado y una indemnización para la víctima de 2.500 euros.
Finalmente, el Ministerio público tuvo en cuenta la atenuante de reparación de daño, dado que el acusado consignó 2.767 euros para indemnizar a la víctima, así como la de dilaciones indebidas, de modo que modificó sus conclusiones provisionales y rebajó la pena de cárcel a un año y seis meses.
De acuerdo con el escrito de acusación, los hechos sucedieron el 11 de enero de 2014, sobre las cinco de la tarde, cuando se estaba disputando el partido de fútbol de veteranos entre el Montouto, equipo en el que militaba el acusado, y el Lambruxos, de Sarria. En un momento dado, el árbitro del partido le sacó una tarjeta amarilla por un lance del juego, a lo que el acusado respondió con un “fuerte puñetazo en la boca”, que le provocó varias lesiones. De hecho, a causa del golpe, el árbitro perdió una pieza dental.
