jueves. 28.03.2024

El hombre que este jueves se sentó en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Lugo por presuntamente abusar sexualmente de tres sobrinas políticas suyas cuando eran menores de trece años -hoy han cumplido todas la mayoría de edad-, aseguró en el juicio que “nunca” tocó a las niñas y culpó de sus denuncias a una “mano negra” que pretende perjudicarlo. A preguntas del ministerio fiscal, el acusado dijo que “nunca jamás” se había “quedado a solas con las niñas” y que “nunca” las tocó fuera de lo que es normal en una relación familiar.

 

A su juicio, la denuncia de cuatro de sus sobrinas políticas sobre esos supuestos abusos sexuales han sido provocada “por una mano negra que está detrás de ellas”, aunque a preguntas de la fiscal, no supo concretar qué personas podrían haber influido sobre su criterio para que formulasen semejantes acusaciones. Insistió, en todo caso, en que todas “están bien aleccionadas por alguien”. De hecho, dijo que se enteró de sus acusaciones cuando lo fueron “a buscar a casa”, además de aclarar que nunca mantuvo contacto posterior con ellas para pedirles explicaciones por la denuncia, algo que sí hizo su mujer, tía de las jóvenes. Las víctimas declararon en la vista oral a puerta cerrada.

 

El ministerio fiscal solicita una pena de 32 años de cárcel para el acusado como supuesto autor de delitos de abuso sexual continuado a tres sobrinas políticas que en el momento de los hechos eran menores de edad. Según el escrito de acusación, el hombre también abusó entre los años 1996 y 1998 de otra de sus sobrinas políticas cuando quedaba a su cuidado, dado que pasaba “cada domingo y días de verano en un domicilio familiar” ubicado en la zona de Monforte de Lemos. El fiscal considera que, “con el pretexto de jugar”, la introducía en su vehículo y “allí le acariciaba diversas partes de su cuerpo, incluyendo la zona genital”.

 

Sin embargo, en lo referente a este cuarto caso, la Fiscalía recuerda que la chica, que alcanzó la mayoría de edad en 2005, no presentó denuncia por estos hechos hasta el 28 de septiembre de 2016 ante el Juzgado de Instrucción número 1 de Ourense, cuando los hechos ya habían “prescrito”. En el caso de las otra tres sobrinas menores, una de ellas alcanzó la mayoría de edad en 2007, la otra lo hizo en 2010 y la tercera en 2018. Todas presentaron denuncia ante el Juzgado de Instrucción número 1 de Ourense también el 28 de septiembre, pero en su caso los hechos todavía no habían prescrito. El fiscal acusa al procesado de aprovechar los momentos en los que quedaba a cargo de las menores, o en el las reuniones en el domicilio familiar, para realizar tocamientos a las niñas en las zonas genitales.

 

El ministerio público considera que esos hechos son constitutivos de tres delitos continuados de abusos sexuales a menores de 13 años y, además de solicitar una pena de 32 años de cárcel, pide que el acusado sea condenado a pagar una indemnización de 90.000 euros, 30.000 para cada una de las víctimas. Como consecuencia de esos hechos, las víctimas presentan daños psicológicos, tales como trastornos adaptativos y estrés postraumático, por los que están recibiendo tratamiento psiquiátrico.

Un hombre acusado de abusar de tres sobrinas dice que "nunca" las tocó