jueves. 28.03.2024
Justicia | Ourense

Un joven ratifica que fue agredido tras perder un testículo

Un joven orensano de 23 años, víctima de una presunta agresión, que le dejó sin un testículo, ha ratificado hoy que fue agredido por parte de un vecino de la localidad, de 66 años, y ha negado que forcejease con él, mientras el acusado ha mantenido que fue un "golpe fortuito" que acabó en "desgracia" tras asegurar que "nunca" tuvo intención de golpearle.

- Un joven orensano de 23 años, víctima de una presunta agresión, que le dejó sin un testículo, ha ratificado hoy que fue agredido por parte de un vecino de la localidad, de 66 años, y ha negado que forcejease con él, mientras el acusado ha mantenido que fue un "golpe fortuito" que acabó en "desgracia" tras asegurar que "nunca" tuvo intención de golpearle.

 

El presunto agresor, Julio G.F. ha prestado hoy declaración en la Audiencia Provincial de Ourense, como presunto autor de un delito de lesiones, por el que la Fiscalía pide cuatro años de prisión -6 la acusación particular- y el pago de algo más de 44.000 euros en concepto de secuelas. Mientras, la defensa pide la libre absolución. Los hechos se remontan al 26 de julio de 2015 cuando el acusado, que se disponía a ir a limpiar una finca y llevaba consigo dos perros "palleiros", se encontró con el joven, que iba en coche. Presuntamente, el hombre golpeó con una raqueta el coche y cuando el joven se bajó le dio una patada, después de que éste le hubiese recriminado que sus perros entorpecían el tráfico.

 

A partir de ese momento, las versiones son diametralmente distintas. El acusado ha relatado, en el juicio, que dio un toque al vehículo con la raqueta y afirmó que entonces, para su sorpresa, éste "se bajó muy enfadado", le agarró y le tiró al suelo. "En ningún momento se me ocurrió golpearle", ha declarado el acusado, quien ha calificado lo ocurrido como "una desgracia" a la que "no le di importancia" ya que el joven se fue de allí por su propio pie. Según sostiene la Fiscalía, ese día, cuando el acusado iba de camino a la finca, se encontró con el joven, que se bajó de su furgoneta porque el acusado le había dado un golpe con la raqueta en la parte trasera del coche y le recriminó lo ocurrido, recibiendo una fuerte patada que le dejó sin testículo.

 

La victima ha reconocido que, al sentir el golpe, se bajó para recriminarle su actitud pero ha precisado que en ese momento "sin venir a nada, me golpeó en los testículos" negando un presunto forcejeo. A raíz de estos hechos, el denunciante sufrió un traumatismo testicular izquierdo con rotura que le mantuvo hospitalizado durante tres días y tuvo que ser intervenido quirúrgicamente. En sus conclusiones, la fiscal ha considerado acreditada la agresión y rechazó que se trate de un golpe fortuito, como alegó la defensa, dada la gravedad de la lesión, y ha añadido la existencia de un "dolo eventual" en base a que el acusado tenía conocimientos de artes marciales, en la línea que la acusación particular que consideró al acusado como el verdadero "hilo conductor" de lo ocurrido. "El propio instructor del caso dijo que tuvo numerosos altercados con vecinos del pueblo, hasta once" además de que es un "experto en artes marciales", en concreto, cinturón azul de taekwondo. Además, ha asegurado que los propios vecinos de la localidad realizaron una recogida de firmas para denunciar "las escenas violentas y amenazantes" por parte del acusado. Por estos hechos, la fiscal pide que sea condenado a 4 años de prisión y que indemnice a la víctima con algo más de 44.000 euros, en concepto de secuelas, más 1.650 por los días de incapacidad. La acusación particular eleva su pena a seis, por entender que es experto en artes marciales y pide 73.000 euros. Por su parte, la defensa ha pedido la libre absolución al entender que se trata de un "caso fortuito" y que el acusado no tuvo intención de golpearle. Para refrendar su afirmación, ha argumentado en que el joven se acercó a él de forma "violenta" y que a raíz de ahí hubo un forcejeo entre los dos, ya que "sí no, no se puede entender lo que luego sucedió". Para ello, ha señalado que informes médicos muestran que presentaba laceraciones en sus manos, que "corresponderían" con que habría agarrado al acusado. También ha pueso en duda un posible abuso de superioridad dada la edad de ambos. En su alegato final, el acusado ha asegurado que hace "más de diez años que no realiza taekwondo" y ha subrayado que "nunca" se ha tomado la justicia por su mano.

Un joven ratifica que fue agredido tras perder un testículo