La asociación animalista Libera ha reclamado este lunes nuevamente que se prohíba la participación de menores en actividades de caza tras advertir de que es “peligrosa y nociva” para su integridad moral, después de que un joven de 21 años falleciese este domingo tras dispararse accidentalmente con su arma. El joven se disparó accidentalmente durante la participación en una actividad cinegética, en el ayuntamiento orensano de Chandrexa de Queixa.
En un comunicado remitido a los medios, integrantes de Libera han denunciado la “carencia de límite alguno” a la hora de que participen en calidad de espectadores o "acompañantes" en las batidas en Galicia, mientras acusan a la Xunta de Galicia de intentar en el debate del Proyecto de Ley de Caza en el año 2012 que se “rebajara la edad de participación directa, esto es portando armas, de los 16 a los 14 años”. De hecho, han recordado que “en la última década” han fallecido como consecuencia de esta actividad “al menos una quincena de personas” tan sólo en la comunidad gallega, un dato al que habría que sumar otros “tantos heridos y accidentes” durante la práctica de este “supuesto deporte”.
La asociación animalista ha instado a la Administración autonómica a que aparte "a la infancia” de esta actividad al entender que es “peligrosa y nociva para su integridad moral y física”. Por el momento, este colectivo ha conseguido reunir más de 76.000 firmas a través de una iniciativa publicada en change.org para pedir al Gobierno gallego que prohíba la participación de menores de edad en actividades de caza. En concreto, quieren que se modifique la Ley de Caza de Galicia de 2013, donde se estipula que la edad mínima para participar en actividades cinegéticas es de 16 años, y elevar dicho veto hasta los 18 años.
