jueves. 18.04.2024
Pontevedra

Pontevedra afronta un "día duro" tras temer un incendio similar al de Lisboa

El Ayuntamiento de Pontevedra llegó a temer, según ha desvelado hoy la concejala de Seguridad Ciudadana, Carme da Silva, que el incendio que anoche devoró por completo uno de los edificios más emblemáticos del centro histórico, situado entre la plaza de A Ferrería y la calle Michelena, tuviese unas consecuencias similares al que tuvo lugar en el barrio de Chiado (Lisboa) en 1988. Uno de los establecimientos comerciales que fue arrasado por las llamas, La Moda Ideal, era uno de los más antiguos de la ciudad gallega y llevaba abierto de forma ininterrumpida desde 1896. Antes de esa fecha había sido un café concierto.

 

"Es un día duro para los propietarios, pero también es un día duro para toda Pontevedra porque cuando arde el centro histórico arde una parte de la historia de la ciudad", ha señalado la edil en una rueda de prensa en la que dio a conocer los detalles del operativo que se desplegó tras iniciarse el incendio.

 

Carme da Silva ha explicado que hubo "peligro" de que el fuego se propagase por toda la manzana, algo que habría sido "irreparable" para el centro histórico de la ciudad y que fueron los miembros de todos los servicios de emergencias del ayuntamiento con su actuación "profesional, rápida y eficaz" los que impidieron que las consecuencias fuesen más graves. El primer aviso a los bomberos se produjo a las 20:38 horas y lo dio un ciudadano que paseaba por la calle Michelena y que "vio humo saliendo del edificio". A partir de ahí, se puso en marcha un amplio dispositivo de seguridad y en "cuestión de minutos", los bomberos llegaron a la zona del incendio y se pusieron al frente del operativo.

 

Los bomberos optaron por hacer frente al incendio por Michelena porque, según el jefe del servicio, Manuel Torres, "valoramos que el riesgo estaba allí" al entender que la posibilidad de que el fuego se extendiera al resto de edificios de la manzana era "importante". No fue fácil porque ha reconocido que en la zona interna del inmueble el incendio "ya estaba generalizado" y los bomberos tuvieron que combatirlo "desde arriba".

 

Cuando el fuego ya había sido "atacado" desde Michelena y el riesgo se había reducido, los bomberos se dirigieron hacia la plaza de A Ferrería en donde las llamas eran "voraces" por la propia estructura del inmueble, construida en madera, y por el material "altamente inflamable" que había en los establecimientos comerciales.

 

Apenas dos horas después del inicio del fuego, a las 22:50 horas, el incendio estaba controlado y los bomberos garantizaron que el fuego no se extendería a los edificios colindantes. Hubo para ellos, también, momentos de peligro, especialmente cuando el edificio de A Ferrería "colapsó", según ha indicado la edil del BNG, al quedar arrasada la estructura de madera continua que unía los dos inmuebles.

 

Los trabajos para enfriar los restos del siniestro continuaron hasta las tres y media de la madrugada. Una hora después, concluyeron las primeras tareas de limpieza y se levantó el cordón de seguridad en todo el perímetro, salvo delante del edificio afectado. Además de los bomberos de Pontevedra, acudieron efectivos desde Poio, O Salnés y O Morrazo para colaborar con las tareas de extinción.

 

Mientras tanto, agentes de la Policía Local y de la Policía Nacional apoyados por voluntarios de Protección Civil de Pontevedra se encargaron de desalojar los edificios más próximos al incendio "por seguridad" al detectarse en ellos grandes cantidades de humo y de monóxido de carbono. Fueron desalojadas nueve personas que, en el momento del incendio, estaban en sus viviendas y, en total, el Ayuntamiento realojó a doce personas para que pudieran pasar la noche en un establecimiento hotelero de la ciudad.

 

El resto de los afectados, más de una veintena, pasaron la noche con familiares y amigos hasta que, a primera hora de la mañana de hoy, los bomberos les entregaron las llaves de sus casas tras haberlas aireado y pudieron regresar a sus respectivos domicilios. Sobre las causas del incendio, por ahora, no hay una explicación oficial.

 

Agentes de la Policía Científica han interrogado en las últimas horas a los propietarios de los inmuebles afectados y de las viviendas colindantes, pero durante la noche no han podido entrar en el edificio ante el riesgo para su propia seguridad. Se espera que lo hagan a lo largo del día de hoy, una vez hayan finalizado los trabajos que siguen realizando los bomberos en todo el perímetro.

 

En este sentido, el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, ha querido dejar claro, a expensas de los informes oficiales, que el incendio se habría podido producir de forma involuntaria porque "hay cosas que son así y no existe riesgo cero". Fernández Lores ha alabado la actuación de todos los cuerpos profesionales y de la ciudadanía "en general", subrayando la rapidez con la que se dieron los hechos. También la concejala de Seguridad Ciudadana ha defendido a los bomberos frente a las críticas y abucheos recibidos cuando llegaron a la plaza de A Ferrería porque la gente "no había visto que estaban trabajando en Michelena".

 

Carme da Silva ha reiterado que se optó por actuar así por un criterio "únicamente profesional", al entender los bomberos que era de esa manera "cómo debían atacar un incendio de esas características". "Puedo entender esas manifestaciones por parte de los propietarios que estaban muy preocupados desde el punto de vista material y sentimental, pero las que no puedo entender son las de otras personas", señaló la edil del BNG ante esas críticas ante la presunta descoordinación del servicio y la tardanza de los bomberos en atajar el incendio.

 

Pontevedra afronta un "día duro" tras temer un incendio similar al de Lisboa