La Guardia Civil ha denunciado a un joven de 23 años que condujo de forma temeraria por el casco urbano de Vila de Cruces y se acabó accidentando en Lalín con su vehículo, que no tenía la ITV pasada y carecía de la cobertura del seguro obligatorio.
Además, el conductor, que dio negativo en las pruebas de alcoholemia y de drogas, tenía el carné sin vigencia como consecuencia de la pérdida de la totalidad de los puntos asignados, informaron fuentes del instituto armado.
Varias llamadas alertaron a la Guardia Civil de la presencia de un Renault Megane realizando trompos y circulando a excesiva velocidad por el casco urbano de Vila de Cruces. Hacia las 21.00 horas de este miércoles, los agentes que realizaban una batida por la zona tuvieron conocimiento de una salida de vía de un turismo en una carretera local que une O Corpiño y A Goleta, en Lalín, y que resultó ser el mismo que estaban buscando.
El conductor, que estaba ileso, no pudo justificar el motivo del desplazamiento que estaba realizando, por lo que incumplía el confinamiento establecido tras la entrada en vigor del estado de alarma para la gestión de la crisis sanitaria del Covid-19.
Por tanto, ha sido denunciado por dos delitos contra la seguridad vial, uno como resultado de una conducción manifiestamente temeraria y otro con motivo de la conducción tras la pérdida de vigencia del carné, que serán remitidas al Juzgado de Instrucción de Guardia de Lalín.
Además se confeccionan las oportunas denuncias por carecer de seguro obligatorio, por no haber pasado la ITV y por saltarse las normas de confinamiento.
También en Lalín la Guardia Civil interceptó en un control a un conductor que tenía el carné retirado y dio positivo en la prueba de alcoholemia. Éste alegó que se dirigía a un supermercado, pero los agentes apreciaron evidentes síntomas de embriaguez. Arrojó sendas tasas que duplicaban la tasa máxima permitida de alcohol.
