El Partido Popular y el PSOE han rechazado hoy la creación de una comisión de investigación en el Congreso de los Diputados sobre el accidente ferroviario de Angrois, lo que ha generado el malestar de algunos familiares de las víctimas presentes en la tribuna de la cámara, de donde han sido desalojados.
La comisión, cuyo aprobación habría sido simbólica dado que la próxima disolución de las Cortes hubiera impedido su constitución, ha sido solicitada por Podemos, cuyos diputados han aplaudido a los familiares durante su desalojo y han exhibido camisetas con el lema "verdad, justicia, no más mentiras". Aunque la formación de Pablo Iglesias ha recabado los apoyos de Ciudadanos, ERC, PNV, DiL y Compromís, no ha logrado sumar los del PP y el PSOE.
Los populares han considerado la propuesta "estéril" y "un golpe de efecto mediático" y los socialistas han recalcado que, ante un siniestro como el del tren Alvia en Angrois, que el 24 de julio de 2013 dejó 81 víctimas mortales y más de 140 heridos, no caben la "frivolidad", la "superficialidad" y el "oportunismo político".
"Presumen de democráticas y deben saber que demagogia es la patología de la democracia", ha espetado a los diputados de Podemos el popular Andrés Ayala, mientras que el socialista Juan Luis Gordo les ha acusado de buscar más la rentabilidad política ante los próximos comicios que la verdad y reparar el daño de las víctimas.
Los dos grupos mayoritarios han coincidido también en señalar que la causa judicial aún está pendiente, por lo que crear una comisión de investigación en el Congreso podría interferir en la acción de la justicia. El PP y el PSOE han alcanzado un "pacto de silencio", porque el socialista José Blanco inauguró la línea y la popular Ana Pastor puso en funcionamiento el tren y "desconectó" durante su mandato el sistema de seguridad, ha dicho Alexandra Fernández, de Podemos.
La diputada gallega ha leído en su intervención un extracto de un escrito dirigido a la cámara por la plataforma mayoritaria de familiares de las víctimas del accidente en el barrio compostelano. Los familiares, según ha leído Fernández, consideran "miserable" el trato "humillante" recibido de las instituciones públicas, piden diferenciar entre responsabilidades penales y políticas y subrayan que tienen derecho a saber sobre lo ocurrido. Y han querido dejar claro que no les "manipula ni utiliza nadie", en un mensaje dirigido expresamente al portavoz del PP, Rafael Hernando, quien, según Fernández, dijo que estaban siendo manipuladas con fines políticos.
"Es una falta de respeto a la democracia, a la inteligencia y a las víctimas", han denunciado las víctimas en boca de la diputada de Podemos, que al bajar de la tribuna ha entregado una copia de un documental sobre el accidente a Hernando y otra a una diputada socialista, ante las ausencias de Mariano Rajoy y Pedro Sánchez, a quienes seguro que les "emocionarán" las imágenes. Rafael Hernando ha pedido la palabra por alusiones, y ha vuelto a acusar a Podemos de intentar sacar "réditos políticos del dolor de las víctimas".
Ha dejado claro que Podemos no puede dar "lecciones" ni de víctimas de accidentes, ni de víctimas del terrorismo, cuyos autores ahora defiende el partido de Pablo Iglesias. Como un resorte se ha levantado Iglesias de su escaño, denunciado a gritos que era "vergonzoso" lo que acababa de escuchar. El presidente del Congreso, Patxi López, no le ha dado la palabra y ha decidido zanjar la polémica continuando el debate con el siguiente orador, el portavoz de Compromís, Joan Baldoví.
