El juicio contra un hombre acusado de abusar sexualmente de una menor de edad con una discapacidad reconocida del 33 % a la que convenció tras mantener varias conversaciones por whatsapp en las que se hizo pasar por una vidente de Valencia se está celebrando este jueves a puerta cerrada.
Así lo resolvió el tribunal de la sección quinta de la Audiencia de Pontevedra a petición de Fiscalía y acusación particular en vista de que la víctima es menor y por su especial situación de vulnerabilidad.
La Fiscalía pide 25 años de cárcel para el procesado, quien, según señala en el escrito de acusación, abusó por primera vez de la menor en su casa, a la que aquella fue porque es amiga de su hija. Meses más tarde, contactó con la chica por whatsapp y se hizo pasar por una vidente que la convenció para que mantuviera relaciones sexuales con él.
El fiscal recoge otros dos encuentros sexuales en una zona de monte, en ambos casos antes de que la chica cumpliese los 16 años. Sostiene que la discapacidad de la chica y el retraso mental leve que padece limita su habilidad para el razonamiento abstracto, para percibir, analizar y sintetizar de forma adecuada determinadas situaciones, y posiblemente afecta a su capacidad para prever las consecuencias de sus actos.
